Director de Agroseguros: "La mejor herramienta de prevención que existe es transferir riesgos"

El sector forestal representa una de las divisiones económicas más importantes en la región del Biobío y con mayor razón para nuestra provincia, y es que año con año ha ido presentando un gran desarrollo en la zona, lo que se traduce en una contribución de un 70% del total de las exportaciones a nivel nacional, y la convierte en la capital forestal de Chile.

Pero este gran desarrollo se ha visto truncado con el megaincendio que afecta a la zona centro-sur del país, lo que ha dejado millones de pérdidas y miles de hectáreas quemadas, con muchos propietarios y trabajadores que perdieron su fuente de ingresos.

Ahora es mucho lo que se ha hablado sobre quiénes de estos estaban asegurados, cuánto es lo que podrán recuperar y bajo qué condiciones.

En ese contexto, Camilo Navarro, director ejecutivo de Agroseguros y coordinador  nacional de Gestión Integral de Riesgos del Ministerio de Agricultura, explicó que “en el Biobío, el 62% de las superficies forestales quemadas estaban en manos ya sea de grandes o medianas empresas, esos sí o sí tenían seguro. Que ahora el deducible sea alto y todo lo demás, y con quizás una pérdida económica importante, es otra cosa, pero de que estaban asegurados, lo estaban”.

Navarro agregó que en “la mayoría de las compañías que operan los seguros de  incendios forestales podríamos decir que en total son más de 50 pólizas; de las grandes no pasan de seis, y todo el resto son de medianas empresas, pequeños o medianos propietarios. En el caso puntual nuestro, con subsidio en la octava región tenemos 20 pólizas por subsidio”.

De este modo, el director ejecutivo de Agroseguros manifestó que “el subsidio del Estado para forestales comenzó en octubre; esta situación nos pilló en marcha blanca, por lo que se ha ido trabajando en la marcha. El Estado nunca había entrado a subsidiar las pólizas por incendios forestales, y nosotros constatamos, y hemos hecho el trabajo de que los pequeños propietarios forestales, que son hasta 200 hectáreas, que no se aseguraban porque nadie les vendía un seguro”, lo que viene a darles un respaldo ante la gran cantidad de incendios forestales registrados en las últimas semanas y en la época estival.

GESTIÓN INTEGRAL DE RIESGOS

Por otra parte, el director ejecutivo de Agroseguros aprovechó de realizar un llamado a los agricultores y propietarios forestales a hacerse cargo hoy, porque “el cambio climático es una realidad, y no lo podemos seguir negando, y esto en riesgos se traduce en eventos más frecuentes e intensos”.

En este sentido, añadió que el ministerio de Agricultura, desde diciembre del 2016, tiene una nueva estructura para entender esto, que es la de Gestión Integral de Riesgos. “Esto entre todo ayuda, es decir, no es sólo transferir reglas o comprar un seguro, uno tiene que invertir en mitigadores, tiene que cuidar bien su bosque, tiene que tener cortafuegos. En el campo tienen que tener aspersores para las heladas”, dijo.

Agregó que “esta es una conjunción en que todos tienen que hacer su aporte, por eso es importante la parte en inversión. Es como el fútbol, tienen que estar coordinadas las partes, porque si no, esto no funciona, nadie puede sacar solo el partido adelante”.

Consultado sobre el precio de estos seguros, Navarro manifestó que “lo que nosotros subsidiamos, la tasa máxima que te pueden cobrar, es 1,3% del monto asegurado, y eso tiene un subsidio del 50%, es decir, quedan casi a la par de las grandes empresas que pagan un 0,5%, entonces les estamos emparejando la cancha. Eso es un alegato”.

VALOR LÍMITE

El único límite, en el caso de los forestales, es para que justamente no ocupen los subsidios del Estado los grandes, que ya han recibido bastante con el decreto de ley 701; es que en ese caso, el tope es de 80 UF por RUT, esto para focalizarlo en los pequeños y medianos propietarios, es decir, hasta de 400 hectáreas.

En el caso de todos los otros seguros del sector pecuario y agrícola, el tope es de 80 UF, pero por póliza, es decir, si es un agricultor que tiene un tamaño más amplio, lo que puede hacer, con un camino interior, por lotes destino, es tomar distintas pólizas, y cada póliza se autocontiene con ese tope de subsidio.

“Lamentablemente, estas situaciones así nos lleven a la reflexión: nos llevó el terremoto, el aluvión de Atacama, que no nos pille tarde esto de nuevo no estando prevenido, y la mejor herramienta de prevención que existe es transferir riesgos”, enfatizó Camilo Navarro.

Finalmente, recalcó que “el chip de gestionar los riesgos que tienen que tener nuestros empresarios, ya sea del mundo forestal o agrícola, de diferente tamaño, tiene que ser realidad; no podemos seguir  apostando esto como si estuviéramos en el casino, y decir que a mí no me va a pasar”.