Por favor, seamos prudentes

El pasado domingo, nuevamente las calles y avenidas de nuestra capital provincial, se transformaron en escenario de una desgracia.

Un lamentable accidente de tránsito dejó dos muertos y una serie de heridos en avenida Las Industrias.

De acuerdo a lo que se ha informado, uno de los automóviles salía de la caletera existente en el lugar, cuando fue impactado por un segundo vehículo.

Esta semana en particular, la desesperación por las compras navideñas, los viajes de último minuto o simplemente la imprudencia a la cual estamos acostumbrados, pueden hacer que la celebración del próximo fin de semana, se acabe de golpe para nuestros seres queridos.

Por dicha razón, es necesario aprovechar estas líneas para llamar a la población a ser prudentes y responsables. No sólo está poniendo en riesgo la propia vida, sino que además la de  nuestros seres queridos o de personas inocentes que muchas veces pagan el precio de nuestras negligencias.

A fin de año, se produce un momento único en la vida de los seres humanos y por sobre todo de la familia. Es una instancia en que todos hacen un alto para mirarse a los ojos, entregarse afecto, abrazarse y compartir las experiencias que en muchos casos se dejan de lado el resto del año producto de la rutina. En consecuencia, una imprudencia, sólo contribuye a destruir este momento con acciones que son totalmente evitables.

Si durante esta semana, usted sale a realizar sus compras navideñas, hágalo con tranquilidad. Las calles estarán saturadas de vehículos y peatones. Las posibilidades de tener complicaciones son altas, por lo tanto, no pierda el control.

El año pasado, el fin de semana de Navidad dejó como saldo en el país a 12 personas muertas en accidentes de tránsito.

En tanto, en nuestra provincia de Biobío, hace exactamente un año, un violento accidente de tránsito en la ruta que une Concepción con Cabrero, terminó con la vida de 6 personas; familias, deportistas y amigos de muchos.

Por favor, aprendamos de estos hechos una lección.

Está en nosotros que recordemos el mes de diciembre en el futuro como un momento inolvidable desde el punto de vista familiar o que lo transformemos en una desgracia.