Regístrate Regístrate en nuestro newsletter
Radio San Cristobal 97.5 FM San Cristobal
Diario Papel digital
La Tribuna

Compañías eléctricas: un poco de respeto por las zonas rurales no les vendría mal

por Gabriel Hernandez Velozo

Frontel, la que ha presentado las fallas más recientes y sus empresas pares, deben entender que parte de su trabajo también otorga dignidad y calidad de vida a los habitantes y eso no puede pensarse sólo como estadísticas dentro de un computador.

Basta recorrer los sectores rurales de nuestra provincia de Biobío, para evidenciar la postergación en la que se encuentran. Prácticamente no ven avances y cuando los hay, las autoridades prácticamente quieren que les rindan pleitesía, por “acordarse” de ellos.

En nuestro trabajo periodístico, es común conocer que muchos sueñan con la pavimentación, que durante cada elección se las van a prometer, pero que nunca llega.

Lo mismo sucede con la electricidad y aquí es donde la necesidad de tomar en serio a la comunidad cobra importancia.

Los sectores rurales de Los Ángeles, Mulchén y prácticamente todas las comunas que comprenden nuestro territorio, satisfacen sus necesidades eléctricas y de agua con la luz, transformándose este servicio básico, en un elemento fundamental para vivir. Sin embargo, las empresas no siempre trabajan con la celeridad y profesionalismo que se requiere para atender los cortes de energía y, es común conocer reclamos de los sectores por estar 5, 10 o incluso 20 horas sin luz, como el caso ocurrido el fin de semana en Aurora de Enero de Mulchén o tantos otros, que inclusive han estado días esperando por la reposición del suministro.

Es verdaderamente una burla para los vecinos el comportamiento de las compañías locales.

Por ello, Frontel, la que ha presentado las fallas más recientes y sus empresas pares, deben entender que parte de su trabajo también otorga dignidad y calidad de vida a los habitantes y eso no puede pensarse sólo como estadísticas dentro de un computador.

Lo que han señalado las compañías es que quienes pierdan sus alimentos o se les destruyan sus equipos eléctricos pueden tener reposición, pero los mismos vecinos señalan que en la práctica esto no ocurre y es fácil de entender.

Los afectados señalan que para la devolución, les piden en ocasiones las boletas de lo comprado y esto demuestra una vez  más la poca comprensión del entorno en que funcionan. El sector rural, se maneja en base a lo que cultivan y existe mucho trueque entre los propios vecinos.

Las carnes de los animales se despostan y se transan de maneras diferentes y no es cuantificable la pérdida.

Finalmente, los cables eléctricos, los transformadores y gran parte de la red, deja mucho que desear. Se encuentran con retraso tecnológico de décadas y eso es indigno. Es hora que las compañías se adapten inviertan y piensen en el destinatario final que le permite hacer funcionar su empresa.

 

Síguenos: Google News
banner redes
banner redes banner redes banner redes banner redes banner redes

¿Quieres contactarnos? Escríbenos a [email protected]

Contáctanos
EN VIVO

Más visto