El apoyo cuando conviene

La provincia de Biobío se ha caracterizado constantemente por entregarnos deportistas destacados a nivel nacional. Desde el judo, pasando por el ajedrez, el tenis de mesa e incluso el canotaje, son algunas disciplinas en las que han destacado representantes de la zona.

Pese a ello, los deportes más populares no siempre tienen un buen peso y requieren de sumas millonarias para sustentarse. El tenis, el básquetbol y el fútbol, hoy por hoy requieren de grandes sumas de dinero, teniendo que recurrir constantemente a entidades particulares para poder sobrevivir.

Uno de los deportes que se ha ido consolidando en la capital de la provincia de Biobío es el básquetbol, que luego de más de una década de amplio trabajo con ligas de clubes y escolares, por fin tuvo el gran premio de llegar al profesionalismo, algo impensado hace un par de años, por lo que se espera una amplia asistencia de público en el Polideportivo angelino.

Por otro lado, Iberia lleva en el profesionalismo desde el 2012, año en que participó en la Segunda División Profesional tras haber entrado junto con Provincial Osorno, Arturo Fernández Vial, Deportes Temuco, Deportes Melipilla y Deportes Copiapó, pese a ello vive otra cara de La Moneda.

La mala campaña del elenco “azulgrana” ha desmotivado a los hinchas, quienes poco a poco han dejado de asistir al estadio municipal en cada fecha que juegan los dirigidos por Nelson Soto como local. Sin ir más lejos, en el último duelo que se jugó en Los Ángeles, cuando Iberia cayó ante Rangers de Talca, sólo asistieron un poco más de 500 personas, una cifra pobre, si se considera que hay un proceso de construcción de un estadio, que en un principio tenía capacidad para 12 mil personas.

Pero, ¿qué pasa en Los Ángeles que el público general no disfruta del deporte? Pareciera ser que existe, lo que sucede en el país en general, si no se anda bien, la gente no asiste a ver deporte. El ejemplo más claro de esto es precisamente Iberia, elenco que solía llevar mil 500 personas normalmente en los partidos de local cuando militaba en la Segunda División Profesional, pero que en el duelo que marcó el ascenso del equipo, en ese entonces, liderado por Ronald Fuentes, el estadio colmó su capacidad con cerca de 5 mil personas en el recinto.

Por lo mismo, pareciera ser que en Los Ángeles, es necesario una política que incluya al deporte como algo para disfrutar de por sí, más allá de los buenos o malos resultados del plantel.

Se especula que desde el primer partido, Andino tendrá un buen marco de público en el Polideportivo, pero es de esperar que esto no vaya cambiando con el tiempo y que los niños y la familia puedan disfrutar de una actividad tan linda como el básquetbol.  

Sebastián Díaz Sandoval

Periodista La Tribuna