No podemos ser conformistas con el puesto 55 en el ICVU

El pasado martes, se dio a conocer el resultado del Índice de Calidad Urbana – ICVU correspondiente al año 2017, elaborado por el Núcleo de Estudios Metropolitanos del Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales de la U. Católica y la Cámara Chilena de la Construcción.

En él se destacó que la capital de la provincia de Biobío – Los Ángeles - subió 5 puestos respecto de la medición anterior, posicionándose en el número 55º del ránking, ubicándose dentro de las ciudades promedio del territorio nacional.

Sin embargo, pese a destacarse esta alza, hay temas que al angelino o a quien reside en estas tierras lo hace a lo menos dudar.

Analicemos. Primero, la dimensión vivienda y entorno, fue la que tuvo la mejor evaluación con 16 puntos.

Si bien el crecimiento inmobiliario ha sido impactante en Los Ángeles y un aporte, también es cierto que en un gran número de casos los resultados no han sido positivos, ya que el impacto ambiental o vial de las construcciones no se han traducido en mejorar la calidad de vida de quienes residían en dichos sectores. Para qué hablar de las viviendas que no han quedado construidas de la mejor forma como le ha ocurrido a algunos vecinos –por ejemplo– de villa Galilea.

En materia urbana, es cosa de ver sectores como El Avellano, para darse cuenta que sólo se pensó en construir lindas casas, sin preocuparse de cómo salen en horas punta sus habitantes por únicamente dos salidas bastante estrechas. A eso se suma la ausencia de plazas y parques, que nos tienen bajo el promedio exigido por la Organización Mundial de la Salud y que es altamente preocupante y donde no se avanza mucho y donde las constructoras tienen una labor muy importante, ya que los metros cuadrados no pueden ser sólo pensados para edificaciones o estacionamientos.

Sigamos. Al estudio, se le incluye también las condiciones laborales con 8 puntos. La estabilidad laboral, dependiendo del elemento de medición, no es fácil de medir. Si bien el análisis es bastante bueno, hay puntos probablemente omitidos. La gente del campo, que vive en situaciones de alta vulnerabilidad, prácticamente le exige a los agricultores que no les hagan contratos, para no perder los beneficios estatales. Eso es una realidad conocida por todos. Por lo tanto, una gran masa de la población dedicada a las labores rurales campesinas, no entra en este estudio, porque no existen contratos, boletas ni nada que permita acreditar sus condiciones laborales. Punto para analizar en una próxima medición. Y en tercer lugar de los puntos mejor evaluados, se ubica conectividad y movilidad con 5 puntos.

Si bien hay avances como las avenidas Los Ángeles, Sor Vicenta, Alemania o Los Carrera; el cruce Antuco, la avenida Padre Hurtado (en construcción), lo cierto es que llegaron tarde. Para que decir la absurda remodelación de avenida Gabriela Mistral en donde la pintura de la calzada intenta hacerse entender en lo que muchos consideran un ilógico de los ingenieros.

Hay que pensar en grande, el número 55 puede poner orgullosos a muchos, pero la verdad es que falta mucho por avanzar.

Faltan accesos a la ciudad, mejor infraestructura en salud con profesionales, mejores calles, veredas y parques. Faltan puentes y pavimentación rural. Recordemos que nuestra provincia y región lideran los ránkings de los caminos no pavimentados del país. Y finalmente, cuando uno viene del norte o sur, pasa por fuera de Los Ángeles y nada indica que está la capital provincial. Estamos perdidos en el mapa.