Por qué debería hacer más actividades con sus hijos al aire libre

Aunque al mirar por la ventana se nos ocurran un montón de planes con los que disfrutar del sol, lo cierto es que al final acabamos cayendo en las mismas rutinas de siempre, frente a la pantalla de la televisión o del ordenador.

El problema no es sólo que nosotros no hagamos más actividades físicas al aire libre, sino que tampoco las hacen los pequeños del hogar, que también acaban en su habitación mirando el teléfono o jugando a algún videojuego.

El Diario El País de España se refirió a este tema y explica que se debe tratar de modificar las rutinas semanales, para sacar tiempo y hacer actividades en el exterior, que puedan mejorar el bienestar de toda la familia, a corto y largo plazo.

NIÑOS SEDENTARIOS

La actividad física es fundamental para proteger su salud de enfermedades físicas como la hipertensión, la diabetes o la hipercolesterolemia, pero también de patologías mentales como la ansiedad, el estrés o la depresión. Una recomendación es 30 minutos al día de ejercicio físico, aunque sea ir y volver andando del trabajo y del colegio.

Pero el problema no está solamente en los adultos, según datos de la Organización Mundial de la Salud, uno de cada 10 niños y adolescentes de 2 a 17 años, 2 tienen sobrepeso y 1 obesidad. Algo que contrasta con sus hábitos de vida.

Según el mismo estudio, el 48,4% de los niños y adolescentes de 9 a 17 años, pasa más de 2 horas al día delante de una pantalla, independientemente del día de la semana. Pero lo peor es que el 49,3% supera este tiempo en los días de semana, y el 84%, precisamente durante los fines de semana.

Y es que acabar con el sedentarismo, pasa por acostumbrar a los más pequeños a dejar el mando de la consola y salir a moverse y disfrutar de la calle.

MEJOR CALIDAD DE VIDA

Los beneficios de las actividades físicas y deportivas en los niños y adolescente son casi infinitos, entre los cuales, hay que destacar que no solo mejora su salud y calidad de vida, sino que también mejora su autoestima, ayuda a la socialización, aporta educación en valores y se aprende la importancia del esfuerzo, analiza el estudio.

ACTIVIDADES AL AIRE LIBRE PARA DÍAS FRÍOS

Con el frío, los padres se asustan por si los niños se ponen enfermos. Les abrigan hasta las orejas y prefieren que no salgan a la calle a jugar: ERROR.

¿Por qué hay más resfríos en invierno?

El origen del resfriado es vírico, pero los climas artificiales -calefacciones y aires acondicionados-, crean grandes contrastes de temperatura entre el interior y el exterior de los edificios. Esto dificulta que el organismo se aclimate y crea un terreno más favorable para las infecciones respiratorias.

SALIR A LA CALLE ES IMPORTANTE

Aunque jugar al aire libre es más agradable en verano y primavera, no debe ser exclusivo de esos meses. Los niños necesitan hacer ejercicio físico e interactuar con sus amigos durante todo el año para estar saludables física y mentalmente.

En invierno se pueden realizar muchas actividades fuera de casa: parques naturales, visitas a miembros de la familia que viven lejos, representaciones infantiles, conciertos, etcétera. Únicamente hacen faltan ganas de moverse y ropa de abrigo.

Los expertos no se cansan de señalar la relación entre sedentarismo y obesidad. Parece que este incremento está estrechamente relacionado con las más de tres horas de pantalla que ven los niños al día. El deporte es una de las formas más efectivas para luchar contra la obesidad. Y, por mucho que queramos, el ejercicio se hace mejor en el exterior.

En muchas ocasiones los días invernales, tristones o desapacibles, no invitan a pasear. Sin embargo, los niños aún no tienen afinado ese sentido meteorológico tan adulto y no se les chafa un plan por que el cielo esté nublado. Si quieren salir a divertirse, poco les importa que no haga sol y se haya levantado un viento sospechoso.

Aunque el frío no provoque directamente el resfriado, sí que agrava los síntomas. Por eso, si el niño tiene molestias en la garganta, congestión nasal, lagrimeo o sinusitis, no conviene exponerlo a las bajas temperaturas hasta que se le pase.

Pero si los niños están sanos y correteando por ahí a 5º C, abrigados pero no privados de movilidad, los médicos aconsejan dejarles desfogarse. Si sudan, se enfriarán más rápidamente. Pero la solución es fácil: en cuanto termine de hacer deporte hay que abrigarle y punto.

PLANES DE INVIERNO PARA TODA LA FAMILIA

-Excursiones a pueblos o localidades cercanas donde se pueda explorar.

-Andar en bici en parques y zonas verdes o en la montaña.

-Convocar a más miembros de la familia o el barrio para un partido en un parque grande. Hay deportes para cualquier número de participantes, sólo se necesita motivación.

-Si llueve, mirar caer las gotas a través del cristal de la ventana mientras se echa una buena partida de un juego de mesa, por ejemplo, y se planifica a dónde ir cuando escampe.

Lo ideal es cubrir la mayor parte de piel posible con guantes, gorros y cuellos vueltos, pero no hay que extralimitarse con el grosor de las prendas o las múltiples capas, para que los niños puedan moverse con libertad. Hay que conseguir un equilibrio entre ir abrigados y cómodos para que ni se enfríen ni se agobien.