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Nicolás Acuña: "Me empeloté. Me empeloté como lo haría cualquier chileno en su sano juicio"

por La Tribuna

El joven protagonizó una inusual protesta en el patio de comidas del Mall Plaza Los Ángeles, luego que desconocidos le robaran sus pertenencias desde el vehículo de su hermana.

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Saltó a la fama por una singular protesta en el patio de comidas de Mall Plaza Los Ángeles. Nicolás Acuña sí que ha dado que hablar.

El joven de 32 años se hizo conocido la tarde del lunes gracias a un video que circula en redes sociales que lo muestra desnudándose en dependencias del centro comercial.

Su actuar se produjo luego que desconocidos dañaran el vehículo de su hermana, estacionado en dependencias del Mall, y le sustrajeran especies personales avaluadas en un monto cercano al millón de pesos.

La respuesta que le entregó la empresa no lo dejó conforme. Es que sólo se haría responsable de los daños sufridos por el vehículo, pero no de los artículos que mantenía adentro.

Encontrar a Acuña se convirtió en toda una odisea. La Tribuna recorrió todo para dar con el protagonista de esta peculiar protesta hasta que lo encontró, detenido en la Comisaria.

Es que pretendía ser un fin de semana en compañía de su familia. Viajó desde Machalí a Los Ángeles para compartir con su hermana y sus sobrinos.

Tuvo un fin de semana increíble junto a sus seres queridos hasta que algo salió mal en el camino, provocando que su estadía en la capital provincial de Biobío se transformara en una pesadilla.

“Se volvió horrible cuando el día domingo tenía que regresar a mi casa porque el lunes tenía que estar, a primera hora, en Machalí porque tenía que llevar a un grupo de turistas a la cordillera”, relató Acuña.

Ese mismo día fueron a comprar el pasaje; de hecho su bus salía a las 00:45 horas del lunes. Para hacer hora, concurrieron al mall a ver una película; tomó helado y jugó en Happyland con sus sobrinos.

“Todo perfecto hasta que llego al estacionamiento y veo que el vidrio de la camioneta está roto, que no está el bolso con mis pertenencias, mi ropa, la mochila con mi notebook, cargador del celular, la Tablet y la cámara. Cosas que no son tan extrañas de llevar”, relata el joven.

Acuña agrega que los guardias cuestionaron que llevara cosas de tanto valor en sus manos. Sin embargo, explicó que por su trabajo en la montaña ha ido adquiriendo ropa de alto valor y que una prenda pude legar a costar 250 mil pesos.

“Cuando veo que está la camioneta rota y me doy cuenta de que no están mis cosas me entra un cólera, una rabia, una impotencia y me dirijo hacia los guardias porque el auto ni siquiera estaba resguardado por una persona. Estaba ahí, abierto, a vista y paciencia de todos; cualquier persona pudo haber sacado alguna otra pertenencia porque no se llevaron todo. Sólo se llevaron mi bolso de viaje y mi mochila con mi computador y mis cosas. Eso me causó más molestia, que no hubiese alguien responsable del vehículo”, expresa Nicolás.

Cuando se reunió con el jefe de seguridad, éste le habría expresado que su vehículo fue robado cerca de las 22:00 horas.

“Eran las 23:00 horas y todavía no llamaban a Carabineros. Entonces, tú te preguntas ¿por qué no llaman a Carabineros si ven que un vehículo ha sido robado?. Pagamos por el estacionamiento, no lo pedimos prestado; desembolsamos una suma no menor, $5.000 por el estacionamiento”, sostiene Acuña.

A ello agrega que “me dejaron en pelota y me empeloté. Me empeloté como lo haría cualquier chileno en su sano juicio. Me enchuché”, relata Nicolás.

EL REGRESO AL CENTRO COMERCIAL

A primera hora del lunes, Acuña estaba en el centro comercial en búsqueda de una respuesta. Fue justamente ésta lo que le despertó -como él lo expresa- su lado salvaje.

Esperó pacientemente hasta que le dijeron que sólo se harían responsables de los daños del auto, pero no por sus cosas personales fue lo que despertó, justamente, ese lado salvaje.

“Gatilló mi lado animal porque ya no estaba pensando, estaba actuando. En eso, salgo de la oficina, me dirijo al patio central y sin saber qué hacer, me subo a una mesa y empiezo a gritar “me robaron, en este mall me dejaron en pelota y así voy a quedar”.

En medio de su protesta, se fue desprendiendo de sus prendas hasta quedar solamente en ropa interior. En un momento de descuido, fue abordado por los guardias del mall angelino, quienes -tras reducirlo- lo llevaron a una oficina.

En el intertanto, se originó un forcejeo “y me defendí”, estampando una denuncia en Carabineros por las agresiones que habría sufrido por parte de los guardias del centro comercial.

“Los guardias de Mall Plaza Los Ángeles (…) me pisaron, me pegaron e incluso me ahorcaron. No quiero que nunca más nadie pase por eso”, relata el afectado.

Su persona siguió causando revuelo después de que la mañana de este martes volviera a concurrir al patio de comida para encarar a cada una de las personas que lo habrían agredido.

La vida es una paradoja. Por una parte reconoce que la experiencia fue liberadora porque se desahogó. Sin embargo, ese desahogo provocó que Carabineros lo detuviera por desórdenes y debiera ser trasladado hasta la Primera Comisaría de Los Ángeles durante un lapso aproximado de tres horas.

Destacó el actuar de Carabineros, “la persona que estuvo a cargo del procedimiento cumplió con todo” y entiende que lo hicieron porque se lo pidieron.

LA EXPERIENCIA

Todo lo ocurrido lo hizo recordar aquellos casos que han marcado un precedente para que las cosas cambien, como aquel joven que llegó a un local de Mc Donald’s exigiendo su cuarto de libra.

Sin querer serlo, Nicolás también terminó transformándose en uno. “No hay que tener miedo, ya no son tiempos de miedo. Somos libres, podemos decir lo que queramos con respeto”.

Pidió que lo grabaran, pero lo que nunca imaginó fue que iba a quedar registro de aquello. “Es la intervención de un joven del que estoy agradecido y le debo mucho porque fue mi ángel”.

Si bien era lo que quería en un comienzo, nunca esperó lograr acaparar las miradas de miles de personas que ya han visto su video circulando en internet. Tampoco imaginó el revuelo que tomarían esas imágenes, las mismas que lo convirtieron en el centro de una noticia a nivel nacional.

“Mi orgullo, en este momento, es haber despertado la conciencia de un país”, concluye Acuña.

Por lo pronto, espera comenzar acciones judiciales en contra de Mall Plaza Los Ángeles, no sólo por el millón y medio de pesos en especies robadas sino que, además, por la agresión sufrida por parte de los guardias.

SERNAC

La Tribuna consultó al director regional del Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) del Biobío, Juan Pablo Pinto, en torno a qué tan responsables son las empresas en esta materia.

Pinto explicó que la nueva Ley de estacionamientos establece que si la empresa no ha tomado todas las medidas de seguridad adecuadas y se producen hurtos, robos o daños en los vehículos serán civilmente responsables de los perjuicios causados.

“Cuando decimos civilmente, se refiere a que -habiendo una denuncia- puede ser sancionado si se demuestra que tiene un actuar poco profesional o negligente en la custodia de los vehículos y de los bienes que hay en su interior”, expresó el director regional del Sernac.

Asimismo, explicó que lo que ellos pueden hacer como Institución es recoger los antecedentes de esta persona e intermediar con el Mall para que se llegue a un acuerdo.

En el caso de que el consumidor no queda conforme con esa resolución, Pinto explicó que puede perfectamente presentar la denuncia en contra de todos quienes resulten responsables, incluido el centro comercial, quien pudiera tener responsabilidad desde el punto de vista de no haber tomado todas las medidas.

“La normativa establece que de existir un actuar poco adecuado en términos de seguridad, debieran ser responsables de los daños al vehículo además de robos y hurtos”, relató el director.

MALL PLAZA LOS ÁNGELES

A través de un comunicado, Mall Plaza Los Ángeles emitió una declaración pública en torno a lo sucedido.

"Respecto a la situación ocurrida en Mallplaza Los Ángeles, Mallplaza informó que:

1.- El día domingo 21 de mayo el señor Nicolás Acuña Moya, sufrió daños en el vehículo de marca Mitsubishi y aseguró haber sufrido el robo de artículos personales del interior del auto. Luego de  analizar el caso, el equipo de Servicio al Cliente se comunicó con el señor Acuña  y se le informó que Mallplaza se haría cargo del 100% de los daños que sufrió el vehículo, pero no de las posibles especies personales que señala haber perdido el afectado.

2.- Disconforme con esta respuesta, el señor Acuña se manifestó de manera inusual, agresiva y de forma reiterada durante dos días al interior de nuestro centro comercial. Al ser testigos de esta situación personal de seguridad, siguiendo los protocolos establecidos para este tipo de casos logró contener al manifestante.

3.- Lamentamos lo ocurrido y reiteramos nuestro rechazo frente a cualquier tipo de manifestación de tono agresivo y violento que se lleve a cabo al interior de nuestros centros comerciales, y que pueda afectar a nuestros visitantes. Como Mallplaza, colaboraremos con las investigaciones  que determinen hacer las autoridades competentes  sobre este  caso, entregando los antecedentes que se requieran.

4.- Por último, cabe reiterar que para evitar robos de especies al interior de los vehículos,  todos nuestros centros comerciales que cuentan con sistema de estacionamiento pagado, como es el caso de Mallplaza Los Ángeles, cuentan con lockers de seguridad de uso gratuitos para que las personas puedan dejar resguardadas sus especies de valor"

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