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La Tribuna

Familiares y amigos de militares detenidos en Punta Peuco exigen su liberación

por Juan Pablo Vergara

La agrupación "No están solos" nuevamente se manifestó en el centro de Los Ángeles. El coordinador nacional del Movimiento denunció que juicios contra personal en retiro del Ejército son un buen negocio para presuntas víctimas de violaciones a los derechos humanos.

Una nueva manifestación protagonizó la agrupación “No están solos”, en la plaza de armas de Los Ángeles, para pedir por la libertad de los militares presos por violaciones a los derechos humanos.

El grupo nació en febrero de 2015 para apoyar a los internos que se encuentran en cárceles como Punta Peuco, condenados por delitos de lesa humanidad.

En abril pasado la agrupación ya había realizado una manifestación en el centro de la capital provincial, organizando una nueva este fin de semana, la que estuvo liderada, en esta ocasión, por el coordinador nacional del movimiento, Armando Abarzúa, quien denunció que acusar a ex militares o personal en retiro de la Fuerzas Armadas por delitos ocurridos en contra de supuestas víctimas de violaciones a los derechos humanos, se ha convertido en un negocio para algunas personas.

“Nadie toca el tema que cualquier persona que acusa a un militar y lo acusan por presunciones recibe 50 millones de pesos. Esto es una máquina de hacer dinero y, a la vez, los abogados están muy interesados en tomar estos casos, porque se llevan una tajada grande de esos 50 millones de pesos. De hecho, se han entregado más de tres mil millones de dólares con presunciones. Eso significa dos y medio puente de Chacao”, acusó Abarzúa.

La agrupación “No están solos” está conformada por personal en retiro del Ejército, familiares de los militares presos por causas de derechos humanos y amigos de las familias.

Natacha Rivas, militante de Renovación Nacional en Los Ángeles y activa participante del grupo denunció las malas condiciones en las que encontrarían viviendo al interior de las cárceles los presos condenados por delitos de lesa humanidad.

“Muchos internos se encuentran en condiciones paupérrimas similar a lo que sufrieron los judíos en el Holocausto. Hay enfermos de diagnóstico complejo, inclusive terminales, varios de ellos mayores de 75 años, quienes no cuentan con insumos médicos básicos para sus patologías y al momento de llevarlos a hospitales acuden engrillados”, comentó Rivas.

“El objetivo, hoy, de “No están solos” es apoyo logístico a los presos políticos de Punta Peuco y denunciar públicamente la situación y condición de vida actual de ellos. Se trata de un sentido de humanidad”, agregó.

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