Sistema de Análisis Criminal y Focos Investigativos deja 27 personas detenidas

El año pasado, Los Ángeles fue una de las siete ciudades de la Región del Bío Bío donde la Fiscalía Regional centró su atención de manera más selectiva al momento de combatir la delincuencia.

Fue así como, en agosto de 2016, en la capital provincial de Biobío se implementó el Sistema de Análisis Criminal y Focos Investigativos  (Sacfi), iniciativa que nació en la VIII Región.

“Desde hace tiempo que veníamos trabajando esto de focalizar los esfuerzos con la comunidad, con las policías, en aquellos lugares donde detectábamos un fenómeno delictual distinto de lo que ocurría en el resto de las poblaciones, de las comunas”, explicó el fiscal regional del Bío Bío, Julio Contardo.

Ello dio origen al desarrollo de todo un trabajo por parte del Ministerio Público en orden a modificar estas conductas; ya no trabajar el caso a caso sino que dedicarse a la investigación de los focos delictuales.

Esto significa “comprender la criminalidad de las comunas del país y en ese desafío se generaran estos Sacfi. Para ello se destinaron ocho fiscales a la zona, de los cuales uno se destinó a Los Ángeles con el equipo de apoyo y un equipo de analistas criminales que trabaja conmigo en Concepción, con un fiscal jefe que está destinado a estos efectos”, explicó el persecutor.

Esta iniciativa ha implicado un tremendo esfuerzo, traduciéndose en un trabajo de inteligencia, de análisis de datos. Éste permite “ir hurgando en la realidad delictual e ir generando causas que son más masivas, ir agrupando causas”, sostuvo Contardo.

¿Cómo funciona? Si, a modo de ejemplo, existen numerosos casos de delitos contra la propiedad, el SACFI lo que hace es agrupar o reunir un número importante de causas e indagarlas bajo un solo proceso.

“Convengamos aquí que lo que nos ha tocado visualizar es que -en resumen- estamos detrás de los mismos de siempre; son un grupo de delincuentes que cometen la mayor cantidad de delitos contra la propiedad. Eso es lo que hemos detectado y hemos ido sacando de circulación bandas importantes”, sostuvo el fiscal regional.

Contardo explicó que se trabaja de acuerdo al fenómeno que estén investigando, tanto con Carabineros como con la Policía de Investigaciones.

“La idea es trabajar estos casos. Si se trata de una villa o población, por ejemplo, donde se han detectado numerosos delitos vinculados con el robo en los domicilios, robo con intimidación, (el objetivo) es trabajar con la comunidad. Ahí está la información y ahí es donde nosotros también tenemos que enviar el mensaje de seguridad”, agregó el persecutor.

A juicio de Contardo, los resultados han sido bastante positivos. A nivel regional, agregó que este sistema de trabajo les ha permitido esclarecer numerosos ilícitos y desarticular bandas completas en distintas áreas y, principalmente, en los grandes centros urbanos como Los Ángeles.

Un aspecto importante en este sentido, son las denuncias; sin esa información, el trabajo de análisis se hace un tanto difícil.

“Necesitamos la confianza, que la gente denuncie los hechos porque esos antecedentes son posteriormente analizados por este equipo especial y puede dar cuenta de una investigación que dé lugar a un foco delictual que nos lleve a resultados positivos”, enfatizó Contardo.

Asimismo, recalcó la importancia de trabajar juntos en la persecución penal de los delitos entregando antecedentes que permitan perseguirlos.

SISTEMA DE ANÁLISIS CRIMINAL Y FOCOS INVESTIGATIVOS

Esta propuesta, impulsada por la Fiscalía de la Región del Bío Bío, comenzó a desarrollar su trabajo a mediados del año pasado como una de las cuatro regiones piloto a nivel nacional, junto con las de Valparaíso, O'Higgins y La Araucanía.

En la provincia de Biobío, el fiscal de la Unidad de Análisis es Carlos Díaz.

Dentro de estos focos investigativos se encuentran los robos con violencia e intimidación registrados en moteles de la ciudad de Los Ángeles y la banda asociada a su comisión.

Además, también contempla los delitos de robo en lugar habitado que se han registrado en el sector norponiente de la ciudad y los robos con violencia e intimidación en el sector comercial de calle Villagrán.

Los focos ejecutados han permitido formalizado o requerir judicialmente a 27 imputados. De ellos, una cantidad importante han quedado con las medidas cautelares de prisión preventiva o internación provisoria en el caso de los menores de edad.

El trabajo realizado se traduce en que se ha podido sacar de circulación a personas que -en su mayoría- registran un amplio prontuario policial.

Un eje fundamental del plan de persecución penal asociado a los focos lo constituyen las actividades de acercamiento de la Fiscalía y el equipo policial con los afectados.

En este sentido, ya se han realizado reuniones con representantes de la comunidad organizada, como juntas de vecinos, autoridades y la Cámara de Comercio de Los Ángeles.