Una bolsa y más daño al medioambiente

El jueves, Diario La Tribuna publicó un artículo relatando el importante proceso que decidió llevar a cabo la Municipalidad de Los Ángeles respecto de eliminar las bolsas plásticas del comercio establecido.

La medida no es pionera, pero si importante.

Diversos programas y estudios relacionados con la contaminación de playas, mares, océanos y ríos dan cuenta de la contaminación que provoca el plástico y ver las imágenes sobre esta contaminación, a nosotros al menos, nos causa dolor.

La cifra de que al menos 267 especies, entre focas, aves, peces, leones marinos, tortugas, ballenas y otras se ven afectadas por bolsas plásticas; es simplemente alarmante, no por el número, sino más bien por el daño que causa, pues aunque fuera sólo una ya estamos haciendo mal.

Para lograrlo, todas las comunas de Chile debieran ver el ejemplo de Pucón, donde se implementó un plan medioambiental, que entre otras cosas, terminó con el uso de estas bolsas, tanto en los supermercados como en los negocios locales de esta comuna turística.

En concreto, el 1 de enero, todos los supermercados de Los Ángeles dejarán de entregarles bolsas plásticas cuando compre en ellos, en su reemplazo usted será el responsable de saber cómo llevarse sus cosas a casa.

En paralelo y atentos a las oportunidades de negocios que va generando nuestra sociedad, los mismos supermercados han iniciado la venta de estos utensilios con materiales reciclados y biodegradables, lo que para muchos es un nuevo aprovechamiento de las transnacionales en cuanto a la creación de una nueva necesidad del consumidor que se cubre con la venta de estas bolsas.

Esa mirada es tan cierta como todas las miradas de los seres humanos, pues cada verdad es propia.

Lo importante es no perder el norte y saber que existen alternativas para decidir cómo llevarse las cosas del supermercado.

Es relevante saber que el origen de la iniciativa es cuidar el planeta.

No basta sólo con denunciar a las grandes compañías o a las pequeñas, muchas veces la producción de ellas es más limpia y contamina mucho menos que una sola persona.

Una vez más y como ya lo hemos hecho antes, la invitación del Diario de la provincia es a que cuidemos nuestra tierra, nuestros campos y cordillera, nuestra flora y fauna y también los ríos.

Deje de usar bolsas plásticas en su vida y quizás el planeta se lo agradezca en un par de años, porque esto es serio y nuestro hábitat necesita un descanso de tanto maltrato que le hemos dado.