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La Tribuna

Escuela de teatro y circo se queda sin actividades de verano por falta de fondos

por Marcela Vidal

Cerca de trescientos niños y jóvenes no podrían participar este año de la jornada donde se enseñaba por dos semanas técnicas teatrales y circenses.

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En una difícil situación se encuentran actualmente coordinadores y alumnos de la escuela de verano Perfiles y Siluetas por falta de fondos, ya que no pudieron adjudicarse los montos concursales para esta instancia recreativa.

La décima octava versión de esta reconocida actividad veraniega, dejó a cerca de 300 niños y jóvenes sin la oportunidad de incursionar en alguna de las artes escénicas y circenses que sus instructores impartían por dos semanas en los Ángeles.

Al respecto y con pesar, sus integrantes y coordinadores cuentan a La Tribuna que por primera vez en 18 años estos talleres no se van a realizar y el hecho en cuestión los deja con un gran lamento por no poder acoger a sus participantes que en la provincia claman por estas actividades.

Cabe señalar que esta escuela de verano se impartía desde 1990, entregando variadas técnicas escénicas de teatro y tabloide a niños y jóvenes entre los 8 y 26 años.

HISTORIA DE ESTA ESCUELA ESCÉNICA Y CIRCENSE

Esta instancia de aprendizaje de teatro y circo, tuvo su primera versión en el verano del 2000, en la Casa de la Cultura de Los Ángeles, donde el proyecto nació por la alta convocatoria e interés de los niños y jóvenes de la ciudad,  incluso a nivel provincial.

En el primer año, la iniciativa acogió a más de 70 alumnos; posterior a ello el 2001 se duplicaron a 150 alumnos y así de manera sucesiva hasta llegar al año 2006 con una masiva convocatoria de 300 niños y jóvenes, cantidad que se mantuvo hasta su versión 2017, donde la misma cantidad de niños disfrutó por dos semanas de una serie de aprendizajes artísticos.

Durante este período los organizadores se encargaron de contratar a monitores y lugares aptos para las prácticas de danza, movimiento, actuación, teatro callejero, pantomima, mano a mano, malabarismo y acrobacias aéreas entre otras dinámicas actividades. 

UNA TRADICIÓN QUE MORIRÁ LUEGO DE 17 AÑOS

Por medio de diversos medios, tanto monitores como aprendices, señalaron que es una lástima no poder participar de esta actividad y sobre todo, para sus organizadores, es un lamento no poder generar iniciativas recreativas que aporten cultura a la ciudadanía.

Al respecto Sergio Muñoz, productor general, explicó que “la postulación que no se pudo llevar a cabo ya que la institución encargada (Fondart), lo rechazó por falta de innovación”.

Además agregó que para llevar a cabo este proyecto son necesarios 10 millones de pesos los que eran completados con apoyo de instituciones municipales y el programa Comuna Segura, entre otros.

Además, dice que en esta iniciativa los recursos son necesarios para el pago de honorarios a los 18 monitores que llegan a impartir y resguardar las clases que se entregan de manera gratuita, además de generar pagos a secretarias y personal necesario para generar la instancia de la manera más completa posible.

“Los recursos son necesarios porque nosotros acogemos a una cantidad importante de personas que llegan a formar esta iniciativa durante estas dos semanas”, indicó el hombre que hoy busca en última instancia recursos por otros medios, tocando diferentes puertas sin respuesta positiva hasta este momento y a la fecha la esperan respuesta de un benefactor externo.

Sergio señala que incluso familias esperaban el proyecto, que en su última instancia presentaba un show artístico a la comuna, donde los estudiantes reflejaban su aprendizaje.

LAMENTO DE SUS PARTICIPANTES

Muchos de sus estudiantes señalaron que en esta instancia no solamente era de distracción, sino más bien de aprendizaje con otras personas y miras a futuro, donde el arte invadía sus vidas por medio de diferentes expresiones.

Claudia Morales, es actriz y ha dedicado muchos años a enseñar teatro en esta instancia gratuita para los interesados y considera terrible que muchos niños hoy se queden con la ilusión de participar de la instancia.

“Muchos de los niños que llegan a esta escuela, aprenden teatro o circo de una manera lúdica y disfrutan la instancia señalando que es mucho mejor que estar en clases, puesto que en dos semanas comparten intereses artísticos”, comenta.

De igual manera uno de sus monitores y ex aprendiz, Iván Ruiz, quien por formación académica es profesor de educación física, explica que “el valor de esta escuela para los niños y jóvenes es muy importante debido a que es una instancia esperada todo el año, donde ellos pueden comunicarse consigo mismo y sus pares a través del circo y teatro. Estas ramas son muy importantes ya que son herramientas de autoconocimiento, que llevan a la construcción de una identidad firme” consigna el joven quien fue alumno de esta iniciativa en los años 2004 hasta el 2014 y luego monitor.

UN VERANO SIN ARTE JOVEN

Los integrantes, coinciden en que esta iniciativa dejará sin aflorar importante parte del arte angelino y eso será una lamentable noticia para los participantes que desde noviembre esperan ávidos por las inscripciones de esta escuela formadores de talentos, que en sólo un día copa sus inscripciones.

Ante ello Sergio recuerda que “el indicio positivo de actividad, comienza cuando los niños salen de la rutina y se levanten temprano para concurrir a estas actividades. ¿Qué otras pruebas podrían existir al respecto de la necesidad de esta escuela?”.

Además recuerda que cada año es una emoción ver a los padres de los niños, quienes a finales de enero esperaban ver las presentaciones de sus hijos quienes en dos semanas entregan la mejor y más sana energía en las expresiones corporales.

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