Valentina Valenzuela: una empoderada conductora quebrando el orgullo masculino

En el curso de lo que va del torneo organizado por el Club Calasac, donde arriban conductores desde distintas partes de la zona al reconocido recinto sede de los eventos tuerca de Los Ángeles, el Rancho Curanadú, resalta una piloto que se ha posicionado en los primeros lugares del certamen gracias a su habilidad implacable al volante y al potente motor de su Fiat “Gomita”.

Ella es Valentina Noelia Valenzuela Fuentes, la brillante piloto en categoría Fiat Standar de 23 años, quien durante la semana estudia obstetricia –carrera para ser matrona- y los fines de semana pilotea su flamante nave rosa en el circuito de Curanadú dejando atónito al público y a los varones que hace morder el polvo en la pista.

En cuanto a los circuitos, la conductora comentó que también ha corrido en el circuito de Yumbel, debido a que tiene una pista similar de tierra, pero demostrando interés por largar en otro tipo de pistas.

“Me gustaría probar el asfalto en otro momento, porque  mi concentración está de lleno en el campeonato del Rancho Curanadú, ya que si me llegase a pasar algo, podría perder la oportunidad de correr acá".

Sobre su llameante vehículo rosado “Gomita”, comentó: “Se presentó la oportunidad de comprar un automóvil con mucho esfuerzo y no lo cambiaría por nada, le tengo mucho cariño, lo siento sólo mío".

MOTIVACIÓN PARA DESTACAR

La intrépida piloto comentó que su gusto por las tuercas comenzó desde muy pequeña tras ver sus a sus tíos correr, además le llamó la atención no ver representantes del género femenino.

"Ellos llevan más de 15 años corriendo, por lo tanto íbamos a apoyarles siempre en el circuito. Dentro de este veía pocas mujeres, por lo que mi tío me preguntó porque no corría, así que me arriesgue pese a la negativa de mi madre", afirmó la conductora.

INICIOS EN EL CIRCUITO LOCAL

La joven corredora comentó que debutó el 2015 en el circuito del Rancho Curanadú y, pese a no tener buenos resultados, con mucha humildad aseveró: "Fui super atrás, saqué como el séptimo lugar, pero extrañamente no me puse nerviosa, ahora como mi auto da mucho más, el preparador le pone todo el empeño para sacarle el máximo, así que ahora me da más susto".

De todas formas, la piloto lleva pocos años manejando, antes piloteó motocicletas, asegurando que tiene la actitud necesaria para afrontar el peligro al mando de "Gomita".

Hay que destacar que esta versión del Campeonato de Automovilismo Calasac es el primero que ha corrido completo Valentina, pisando a fondo en todos los compromisos.

Frente a su desempeño al volante, la piloto aseveró que todo es posible gracias al apoyo que le otorgan todos sus cercanos, afirmando: “Como esto no tiene ningún ingreso, es un deporte que con esfuerzo he podido sacar adelante. La ayuda de mi equipo, familiares y universidad han sido trascendentales para mi desarrollo como piloto”.

Además comentó que cuando corre, las pequeñas son sus fanáticas más acérrimas, ya que su auto rosado llama la atención de ellas motivándolas a conducir. 

“Todas quieren correr y ser piloto cuando me ven, yo les digo que sólo lo pueden lograr con esfuerzo, pero especialmente teniendo el apoyo y el valor que entregan las madres a sus hijos dejando de lado el estigma de que es sólo algo que hacen los hombres”, afirmó Valentina.

EMPODERAMIENTO AL VOLANTE

Para finalizar Valentina aseveró que correr significa algo que va mucho más allá de lo personal, ya que lo ve como una forma de incentivar a las damas y que estas adquieran poder femenino. "Yo corro para sacar la cara por las mujeres y demostrar que podemos hacerlo, más que algo para mí, es algo por el género", afirmó la piloto.

Además puntualizó que su máxima motivación es alcanzar el pódium especialmente porque: “Las mujeres pueden arriesgarse en deportes donde somos tan estigmatizadas por los hombres quienes nos miran en menos, entonces eso me motiva a demostrar que podemos ser mejores”.

Ahora Valentina tras obtener el segundo lugar en la última fecha de la competencia, se preparará para poner a fondo con actitud firme en el Rancho Curanadú y lograr el ansiado primer lugar del que está a sólo un paso.