Diferencias entre correr al aire libre y el gimnasio

El mes de enero, el de la culpabilidad debido a los excesos de las fiestas, y la gente decide apuntarse para poder frenar la suma de peso, trae consigo algunas dudas para ponerse en forma una de ellas es si hacerlo en el gimnasio o al aire libre.

Dentro de los deportes más eficientes para bajar de peso se encuentra correr. Evidentemente la cinta del gimnasio quizá no tiene la misma gracia que hacerlo al aire libre, mientras se observa el paisaje pasar ante los ojos y el viento golpea en el cuerpo, pero, si el ajetreado mundo laboral exige hacerlo dentro de una instalación deportiva ¿surte el mismo efecto?

La creencia es bastante frecuente y, sin embargo, expertos en fitness y salud, lo desmiente. Las personas que corren en una cinta tienden a tener una menor longitud de zancada y, a su vez, alzan los pies a una altura mayor en comparación con aquellas que corren afuera. Por lo tanto, contrario a lo que pudiera parecer, usar una máquina para correr puede ser mejor para quienes se están recuperando de una lesión.

MEJORAR LA AGILIDAD

Pero no todo es positivo, las cintas de correr involucran una superficie móvil, lo que significa que los isquiotibiales no trabajan tan duro como lo hacen para mover la pierna hacia adelante. Correr al aire libre, además, hace que tu cuerpo se acostumbre a moverse en superficies desiguales, por lo que mejora tu agilidad. Si solamente utilizas la cinta del gimnasio (o de casa, si es que te has comprado una) no desarrollarás tanto esta habilidad.

CORRER ES MEJOR QUE HACER PESAS SI QUIERES ESTAR JOVEN

Andar rápido aumenta la longitud de los telómeros, por lo que se llegaría a anciano mucho más tarde si siempre se pisa la línea de meta.

Entre otros  beneficios de correr en el exterior, al aire libre y cambiar de paisaje ofrece un interés que no se puede suplir en una cinta, corriendo sin moverse y sin dirigirse a ningún lugar concreto. Cuando se corre al aire libre, generalmente hay cambios en el paisaje y la dirección psicológicamente da una sensación de estar explorando, causando menos agotamiento.

Por otra parte, utilizar la cinta si se ha sufrido una lesión es beneficioso.

En una estudio reciente, los científicos de la Universidad de Exeter encontraron que correr y hacer ejercicio en ambientes naturales se asoció con mayores sentimientos de revitalización y compromiso positivo, disminución de la tensión, confusión, enojo y depresión, así como un aumento general en los niveles de energía y bienestar.

Aunque, está directamente relacionado con el lugar donde viva el individuo. La cinta de correr es de nuevo ideal si se encuentra en lugares donde las temperaturas son extremas. Nadie debe correr en lugares con calor sofocante, debido a una posible deshidratación. Por ello, en esta clase de situaciones siempre es beneficioso tener a mano un gimnasio cercano.

Por lo tanto, a menos que una persona tenga condiciones de salud o lesiones que puedan influir en sus preferencias, tanto correr en una cinta como hacerlo en el exterior pueden proporcionar beneficios de salud adecuados. Elijas el que elijas, según tus preferencias, beneficiará a tu corazón, y eso es lo verdaderamente importante.

Ahora bien, si se busca entrenar para una carrera o mejorar los reflejos, nada mejor que un entorno natural y verde en el exterior. De todas formas, lo mejor es gratis, por lo que correr afuera respirando aire mientras, despeja la cabeza y aleja los pensamientos durante un rato.