Autor de doble parricidio en Alto Bío Bío deberá pasar 18 años en la cárcel

 Dieciocho años de presidio mayor en su grado máximo; esa fue la pena impuesta por los magistrados del Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Los Ángeles a Carlos Pereira Manquepi.

Ello, luego de ser condenado como autor del delito de parricidio consumado que afectó a su madre, Victoria Manquepi Canío, y por el de parricidio frustrado cometido en contra de su padre, Alfonso Pereira Canío.

El hecho ocurrió la madrugada del 3 de julio de 2015, en circunstancias en que el acusado compartía con las víctimas en una reunión familiar.

Tras enfrascarse en una discusión con sus padres, Pereira Manquepi terminó agrediendo al matrimonio con un elemento cortante.

A raíz de las lesiones causadas, Carmen Manquepi falleció producto de un traumatismo encéfalo craneano complicado.

Alfonso Pereira, en tanto, resultó con múltiples lesiones en su cuerpo; todas ellas de carácter grave que lo dejaron internado en el Complejo Asistencial “Dr. Víctor Ríos Ruiz” de Los Ángeles con riesgo vital.

La sentencia fue dada a conocer poco antes de las 11:30 horas de este sábado, en dependencias del TOP angelino; ello, tras un juicio que se llevó a efecto los días 14 y 15 de marzo de 2016.

“Luego de realizada la audiencia de juicio e incorporada la prueba que se rindió en su oportunidad, el tribunal estimó acreditado los hechos que se contenían en la acusación y, por tanto, decidió –en definitiva- condenarlo por ambos delitos”, explicó el juez y vocero del Tribunal Oral en lo Penal de Los Ángeles, Juan Pablo Lagos.

A la pena antes descrita, Pereira Manquepi también fue condenado a las penas accesorias de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos durante el tiempo que dure la condena y a la inhabilitación de derechos políticos y de profesiones titulares.

En este caso, explicó Ortega, a Pereira se le impuso una pena única de 18 años porque es la forma que la ley establece por tratarse de dos delitos que son de la misma especie.

Al momento de decidir cuál sería la pena impuesta, el tribunal consideró la existencia de dos atenuantes.

La primera de ellas era que Manquepi mantenía una irreprochable conducta anterior; la segunda, en tanto, fue la colaboración en el esclarecimiento de los hechos, especialmente en el de parricidio frustrado.

“Durante la investigación como durante el juicio, él reconoció que había agredido a su padre; con términos un poco distintos pero -en definitiva- reconoció la esencia de su actuar, reconoció algunas vestimentas que portaba y participó en las diligencias de investigación que colaboraron con que el tribunal pudiera determinar su participación en el hecho”, puntualizó el vocero del tribunal.