Un proyecto de ley que aumenta los montos para los próximos dos años para el transporte público de la capital y de regiones se encuentra en segundo trámite constitucional.
La iniciativa denominada Ley de Subsidio al Transporte Público, que ahora se discute en el Senado, busca introducir mejoras al sistema remunerado de transporte de pasajeros a través del incremento de los recursos, lo que permitirá definir nuevas estrategias para una operación de calidad.
Para ello, el proyecto aumenta los montos del subsidio permanente en $42.010 millones en 2022; $244.184 millones para 2023 y $320.327 millones para 2024.
Además, la iniciativa habilitará a los Gobiernos Regionales para utilizar los recursos que reciben desde el Fondo de Apoyo Regional (FAR) en subsidios operacionales, incluyendo transporte colectivo mayor y menor, así como también en proyectos de conectividad digital.
“Hoy estamos dando un primer paso en nuestro objetivo de avanzar en el cierre de la brecha entre el transporte público del Gran Santiago y los sistemas regionales. Estos recursos adicionales nos permitirán avanzar en regiones en un elemento tan clave como la regulación del transporte público, que nos permita no sólo ofrecer servicios adecuados para las personas, sino con la frecuencia y regularidad que merecen los habitantes de las distintas zonas del país”, dijo el ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Juan Carlos Muñoz.
SITUACIÓN LOCAL
En conversación con diario La Tribuna, Cristián Rogazy, quien es presidente de la Asociación de Colectivos Paillihue, manifestó sobre el subsidio y la situación de la capital provincial que “en este minuto nosotros no tenemos ningún beneficio del Estado para nuestra actividad, estamos sin financiamiento, lo último que recibimos, lo único que nos quedaba era el Plan Renueva tu Colectivo, que por ley terminó el 2021 y desde ahí estamos sin ningún financiamiento. También hace cuatro o cinco años nos daban un bono para comprar combustible, hasta 5 UTM”.
No obstante, el dirigente de los colectivos del sector sur de Los Ángeles afirmó que actualmente hay un programa que entrega financiamiento para cambiar el taxi por un modelo eléctrico.
Mi Taxi Eléctrico es un programa del Ministerio de Energía, implementado por la Agencia de Sostenibilidad Energética, que busca dar apoyo financiero para que dueños de taxis básicos y colectivos urbanos puedan cambiar sus vehículos de trabajo por uno eléctrico.
En su primera versión, el programa logró el recambio de 50 vehículos a combustión usados como taxi básico por vehículos eléctricos en Santiago, considerando la entrega e instalación de un cargador residencial en la vivienda a costo cero para el beneficiario.
Para la segunda versión se contemplan beneficios para un número de hasta 180 taxis básicos o colectivos urbanos, dependiendo de la oferta que haya en la ciudad, y se extenderá territorialmente a las regiones de Valparaíso, Metropolitana, Biobío, La Araucanía, Los Ríos y Aysén.
El número total de beneficios dependerá de cómo se vayan desarrollando las asignaciones de cofinanciamientos, de acuerdo con la región de los postulantes y autonomía del vehículo elegido.
Dentro de ese programa, aprobado por el Gobierno Regional, está considerada la flota de colectivos de la capital provincial, sin embargo, se encuentra en la etapa de reuniones iniciales.
“Estamos en proceso de asistir a un par de reuniones con todos los personeros de gobierno, hay $7.000 millones de pesos para comprar taxis eléctricos, así que esperamos las postulaciones y empezar a adquirir tecnología en electromovilidad”, afirmó Rogazy.
De este proyecto destaca el trasfondo medioambiental, ya que la electromovilidad contribuye a reducir las emisiones de carbono, los ruidos, más económicos en cuanto al método combustible, entre otros beneficios para el usuario y para el conductor o conductora.
PROYECCIONES 2023
Sobre las estrategias para enfrentar la inflación y mejorar aspectos del servicio, Rogazy dijo que “se viene un aumento de tarifa, serán solo $100”.
En esa línea, el dirigente mencionó que “debido a la inflación y el alza de todos los precios de los ítems que conlleva la actividad, todos los repuestos, baterías cuestan el triple y un poco más. Se nos ha encarecido la mano de obra debido a la inflación”.
En compañía del presidente de la Asociación de Taxibuses, Juan Zapata, abordó distintos temas en cuanto a seguridad. Aseguró respecto a la delincuencia que “los mismos personajes siguen asaltando a diestra y siniestra a nuestros conductores”, por lo que se está trabajando con Carabineros para dialogar sobre eso.
Por otro lado, mencionó que las áreas donde falta inversión “es en tecnología y seguridad, ya que nos vimos afectados por la pandemia, aumentó la movilidad y junto con ello los precios, entonces necesitamos más ayuda”.
Cabe recordar que las tarifas del sistema de transporte público de Santiago y de las zonas reguladas en distintas regiones del país se encuentran congeladas desde el año 2019, desde el estallido social.
A esto, se suma el impacto que tuvo la pandemia en la reducción de la demanda, por lo que ambos factores han provocado un gran impacto en el financiamiento que actualmente tienen las zonas que reciben los subsidios establecidos en esta ley.
Asimismo, dada la inflación y las complicaciones que expuso el gremio de colectiveros es que se anuncia el aumento de la tarifa del viaje en los próximos días.