El "sueño de la casa propia", un anhelo de miles de familias chilenas, muchas veces puede ser engorroso y difícil de conseguir, más aún en la actualidad por la situación económica.
Hay quienes trabajan años con la esperanza de que llegue el día en que las llaves que tintineen en sus manos al abrir la puerta, sean las de la soñada casa propia.
Así lo celebraron 149 familias de un comité de vivienda en Negrete, quienes durante esta semana recibieron los subsidios habitacionales que les permitirá, en poco tiempo, estar habitando su residencia.
Al respecto, el alcalde Alfredo Peña, señaló que después de años de esfuerzo y trabajo conjunto de los vecinos y el municipio se logró materializar la entrega de subsidios.
El jefe comunal destacó que el proyecto habitacional también beneficiará en el desarrollo económico de la zona pues generará puestos de trabajo. "Son tremendas noticias porque Negrete va a crecer no solamente en vivienda y en espacios, sino que también generará trabajo, así que tiene muchas cosas positivas".
MÁS DE 15 AÑOS ESPERANDO
María Beatriz González, presidenta del Comité Habitacional Portal II de Negrete, detalló que de las 149 familias beneficiadas con la casa propia, 86 de ellas son madres solteras que son parte del 40% de vulnerabilidad.
Entre las familias beneficiadas está María Teresa Cifuentes Azocar, madre soltera de dos niños, quien trabaja como temporera agrícola en distintas localidades de la provincia. Actualmente se emplea en la limpieza de árboles de manzana, actividad que inicia a las 6:30 de la madrugada.
Con mucho orgullo, esta madre de familia, dueña de casa y trabajadora contó a Diario La Tribuna, que llevaba más de 14 años ahorrando junto a su hijo y esperando el día en que el sueño de la casa propia se concretara.
Por temas económicos, veía más lejana la posibilidad de tener una vivienda, pero aseguró que jamás se rindió y trabajó duramente por su familia. "Nos pusimos en mutuo acuerdo con mi hijo mayor de juntar toda la platita para la casa, ya con eso pudimos entrar al comité".
María Cifuentes dijo estar alegre, emocionada y feliz de despertar y saber que tendrá su lugar propio para recibir a su hija pequeña y a su familia.
