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Desde tempranas horas, más de 3.000 personas llegaron al recinto convocadas por el llamado del Registro Civil a realizar trámites vinculados al artículo N° 44 de la Ley de Migraciones.
El objetivo era que los extranjeros obtuvieran un número identificador provisorio para acceder a servicios estatales como Fonasa, AFP y el Registro Social de Hogares. Sin embargo, la alta concurrencia superó cualquier previsión, lo que derivó en desórdenes y malentendidos.
El director del Registro Civil, Omar Morales, aclaró que muchos migrantes interpretaron equivocadamente el operativo como una oportunidad para regularizar su estatus migratorio, lo que explica la abrumadora cantidad de asistentes.
En un intento por contener la situación, Carabineros desplegó un amplio operativo de seguridad que incluyó la instalación de vallas metálicas y la presencia de un carro lanzaaguas para evitar incidentes entre los asistentes.
Además, la falta de un sistema oficial de entrega de números por parte del Registro Civil llevó a los propios migrantes a organizarse con listas improvisadas, lo que generó aún más confusión y reclamos.
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