El destino de Deportes Iberia al cierre de esta edición sigue siendo toda una incertidumbre.
Es tanta la preocupación que hasta el propio alcalde de la comuna, Esteban Krause, ha mostrado su inquietud al respecto de este club que representa a Los Ángeles en el Campeonato de la Segunda División Profesional.
“Es extraño lo que sucede en Iberia, desconozco su situación, pero espero que se resuelva prontamente por el bien del deporte en Los Ángeles y su hinchada”, dijo escuetamente la primera autoridad comunal.
Hasta el viernes pasado, la posibilidad que los nuevos inversionistas se hicieran con el control del cuadro azulgrana se hacía difícil. Un quiebre en la mesa negociadora hacía pensar que todo quedaría en nada y que la actual sociedad anónima seguiría al frente, pero ahora sin tiempo de cara al inicio del campeonato.
Sin embargo, hasta el momento no ha habido algún comunicado oficial que clarifique aquello, por lo que se desprende que las negociaciones continúan. Se espera que todo se dilucide entre hoy o el martes. Ya no hay margen de tiempo como para que este tema se alargue en demasía.
UNA SOCIEDAD DE 11 AÑOS
El martes 10 de enero del año 2012, y bajo la administración del empresario Carlos Heller, se realizaba una conferencia de prensa en la que se comunicaba públicamente el propósito que el club se transformara en una Sociedad Anónima Deportiva, elemento vital para ingresar a una recién creada Segunda División Profesional de la ANFP. Una división artificial para salvaguardar los intereses económicos de varios clubes de la Primera B, que mantenían un compromiso financiero con una empresa prestamista.
El 3 de abril de 2012, Iberia fue inscrita en el registro nacional de organizaciones deportivas profesionales bajo el registro número 1500056.
Previo a ello, era necesario crear una corporación deportiva, la que se constituyó el sábado 7 de enero, en una reunión extraordinaria de socios, eligiendo su propia directiva la que quedó encabezada por Enrique Rodríguez; vicepresidente Jaime Cuevas; tesorero, Ricardo Poblete; y Luis Urrutia como director.
El jueves 23 de febrero, la ANFP daba el visto bueno para que el club angelino fuera oficialmente miembro de esta nueva categoría.
Han sido once años bajo la administración de la actual sociedad anónima y los anhelos y proyectos de estar en una mejor categoría que en la Tercera División, ha sido solo una quimera.
Todos los aires de un futuro mejor en Deportes Iberia, solo se ha traducido a la mantención financiera del club y del poco patrimonio que lo sustenta, como es el caso de algunos jugadores formados en la cantera y que hoy son parte del primer equipo.
Ni siquiera el ascenso logrado el año 2014, pudo consolidar el crecimiento institucional.
Una de las ideas que se generaba entre los hinchas y comunidad en general era que, con la instauración de una sociedad anónima, el club dejaría de ser solo once camisetas y unos balones de fútbol, sino que se transformaría en una verdadera institución, con un complejo deportivo propio, con una sede o lugar donde los hinchas se sintieran identificados, donde además pudiesen admirar las copas o trofeos que durante estos años el club ha ganado. Sin embargo, la realidad ha sido muy distinta.
Es por ello que la comunidad, los hinchas, han visto con buenos ojos la posibilidad que lleguen nuevos inversionistas, que le pudiesen dar un aire fresco a este club que con los años ha sufrido un evidente letargo.
Por ello, se espera que con este ‘nuevo norte’ Iberia crezca con el sentido de pertenencia que ha perdido con el tiempo.