En un día como hoy pero del año 1933, en la comuna de Independencia, Región Metropolitana, un grupo de entusiastas jóvenes liderados por Alberto Cassorla Camhi, dio origen a la idea que concluiría en la creación del club.
91 años han pasado desde que en dependencias de la añosa pensión llamada "El Globo", ubicada entre las calles Andrés Bello y Avenida La Paz, del barrio Independencia de Santiago un grupo de jóvenes soñadores optaron por crear un club de fútbol, que terminaría llamándose Iberia y no necesariamente por alguna vinculación con españoles, sino por el apoyo que brindó la Compañía de Seguros contra Riesgo de Fuego y Mar, llamada "La Iberia", (uno de sus integrantes trabajaba en esa compañía).
Todo ello quedó plasmado en un reportaje publicado en la revista Estadio el 14 de julio de 1951, cuyo autor "Pepe Navas", nombre del destacado periodista María José Navasal, y que se titulaba "Quijotes del Deporte".
Doce años después tras participar en competencias regionales, y luego de resultar campeón en el año 1945, el equipo es invitado a jugar en la Primera División, claro que su presencia casi queda desierta, ello a raíz de la queja de los clubes "profesionales".
Su debut en la serie principal fue con una derrota frente a Santiago Wanderers (2-1) en 1946, en una historia que duró ocho temporadas en el fútbol grande.
LA IRRUPCIÓN DE LOS CATALANES
El desembarco de los catalanes a Iberia se concreta recién cuando el club de Alberto Cassorla participa por quinto año en Primera División, hasta 1962; es decir el "apadrinamiento" duró once años. Allí los españoles descolgados del Club Unión Española y otros identificados con los colores catalanes, se comprometieron en cierta forma para apadrinar al humilde club de Iberia, con la única condición de que sus jugadores se vistieran de azulgrana, en alusión a los ideales republicanos que ese uniforme representaba en contra del franquismo. En ese período Iberia continúo en el mismo sector de la capital.
LA APARICIÓN DEL PRESBÍTERO GILBERTO LIZANA
En 1953 se une a la institución el presbítero Gilberto Lizana, quien tuvo un rol fundamental en la historia Azulgrana. Primero, porque desde su llegada se transforma en el "padre" de Iberia. Siempre estuvo preocupado del club, a tal punto que fue él quien termina decidiendo su traslado desde Puente Alto a Los Ángeles en 1969.
ADIOS PRIMERA DIVISIÓN
Tan solo ocho años (1946 - 1954) duró la participación del elenco azulgrana en Primera División. Iberia fue el primer club en descender a la naciente Segunda División.
Los números no mentían, 31 fechas seguidas sin ganar entre partidos del torneo pasado y el campeonato de 1953 - 54, así dejaba ver el infernal camino del club Iberia, que finalmente terminaría por perder la categoría.
EL APOYO CATALÁN SE ESFUMA
En el campeonato del año 1960, tuvo una connotación especial para el equipo iberiano, pues fue el último año en que su indumentaria deportiva (azulgrana) estuvo relacionada con los españoles, especialmente catalanes, debido a que éstos se terminarían alejando del club. Al año siguiente, Iberia regresaba a sus colores de origen, (camiseta blanquiazul).
PUENTE ALTO SU NUEVA CASA
Corría el 3 de junio de 1966 cuando el club se trasladaba hasta Puente Alto, pasándose a llamar Iberia - Fatucen, (Fábrica de Tubos centrifugados). Fatucen era el equipo que representaba a Puente Alto en el Campeonato Regional de la zona central de fútbol, una especie de Tercera División Metropolitana. Sin embargo dicha fusión sólo duró un par de semanas, pues Fatucen se retira de la fusión, (desconociéndose detalles), quedando solo Iberia de Puente Alto.
LOS ÁNGELES Y SU ÚLTIMA Y DEFINITIVA CASA
A finales de los 60, el balompié angelino tenía un buen pasar gracias a su representativo, Club Deportes Los Ángeles, éste era un permanente participante en las ligas del fútbol amateur regional y la hinchada se identificaba plenamente con su club. Sin embargo, sus dirigentes sabían que Los Ángeles y la provincia necesitaban de un mayor espectáculo futbolístico. De esa forma los dirigentes angelinos, entre ellos Carlos Perelló y Manuel Segundo González, postularon a la ciudad ante la Asociación Central de Fútbol como una interesante plaza para el fútbol profesional, pero en su momento la inclusión de otros clubes, esa idea quedó al margen.
Pero siguieron en su porfía. Eran los últimos días de enero de 1969 cuando arriba a Los Ángeles el Padre Gilberto Lizana, con el objetivo de ofrecer Iberia a la comunidad, dado que en Puente Alto, el destino del club pendía de un hilo.
Finalmente el viernes 28 de febrero de 1969, los caminos del club Iberia se unían con la hinchada angelina.
