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El presidente de la Asociación de Panaderías y Pastelerías de Chile (ChilePan), Marcelo Alonso Heredia, advirtió que el incremento de los precios de la energía eléctrica impactará de manera considerable en los costos. A lo anterior se suma la imposibilidad de algunos panaderos de hacer la transición a los a hornos industriales de otra fuente de energía para enfrentar esta coyuntura.
"Nos preocupa que al 2025 vamos a llegar con un 60% de costo de energía eléctrica, que de no controlarse va a ser un golpe brutal para las pymes. Creemos que no se ha abordado bien la materia, porque al aumentarle el costo de la energía a todos los chilenos; todas las pymes y empresas grandes aumentarán sus costos", alertó el dirigente gremial.
Alonso Heredia aseguró que "cualquier subsidio que se entregue a cualquier casa para pagar su cuenta de luz no tendrá efecto porque subirán el pan, los tallarines, los pollos, porque todo se hace con energía eléctrica".
A su juicio, ese tipo de beneficios debe entregarse a las micro, pequeñas y medianas empresas "para evitar que suban los productos que consumen las personas".
El dirigente de ChilePan no aventuró cuánto podría subir el precio del pan porque "porque hay panaderías con hornos eléctricos, otras a petróleo y otras a gas. También hay algunas totalmente automatizadas o que tienen maquinaria más antigua, de 20 a 30 años o más".
A lo anterior se suma que "algunas panaderías cuentan con decenas de vitrinas refrigeradas con bebidas o pasteles y otras que no tienen. Sí puedo asegurar que va a haber un impacto".
El representante del rubro panificador analizó que "si ese 60% para un panadero representa un 20% de su costo, el impacto es brutal. Además las maquinarias generalmente son de energía trifásica, que es más cara que la monofásica, que es la de las casas".
Marcelo Alonso cuestionó "cómo lo va a hacer el que tiene hornos industriales eléctricos y hay muchas panaderías en los centros de las ciudades, que están debajo de un edificio. Ellas no tienen cómo sacar una chimenea. En el centro de Santiago todas las panaderías deben ser parte de este caso porque son parte de un edificio con más pisos".
A lo anterior, se suma la restricción ambiental que deben respetar aquellas panaderías que tienen hornos a combustión: "Tendrían que cerrar esas panaderías", advirtió.
A esas condicionantes se añade el incremento del salario mínimo y la implementación de la jornada de trabajo de 40 horas semanales: "Las panaderías trabajan desde las 5:30 a 6:00 hasta las 20 a 21 horas. Hay tres turnos de elaboración de pan, pero hay que tener personal en el mostrador".
"Las 40 horas significa mayor número de personas a contratar, pero eso no se cumple con un aumento del 60% a 70% de la energía eléctrica al 2025", matizó el presidente de ChilePan.
"¿Qué es lo que va a pasar con las mipymes si el Estado no hace una política propyme de verdad? En 1989, entre un 40% a un 50% del mercado en Chile eran Mipymes y hoy son solo el 14%, pese a que damos cerca del 80% del empleo. Las grandes empresas venden alrededor del 86% del mercado y solo tienen un 10% a un 15% del trabajo ofrecido".
El presidente de la Asociación de Panaderías y Pastelerías de Chile consideró que las grandes empresas pueden pagar un aumento del 6% de costos y las 40 horas, "porque tienen poca gente y mucha venta, entonces tienen espaldas, no así las pymes".
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