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La prevención y reacción oportuna frente a emergencias específicamente de incendios forestales, se ha transformado en una prioridad durante esta temporada estival para las autoridades locales de la provincia de Biobío.
Por lo anterior, es que se están tomando distintas medidas que ayuden a los vecinos y vecinas a trabajar en conjunto en la protección del bienestar de las comunidades.
Una de ellas es la iniciativa que comenzó durante la semana pasada, relacionada con la reacreditación de funcionarios municipales de las 14 comunas de la provincia del Biobío, enfocada en la correcta aplicación de la Ficha Básica de Emergencia (FIBE).
De acuerdo al seremi de Desarrollo Social y Familia, Hedson Díaz, esta herramienta estatal resulta clave para recopilar información esencial ante desastres, como incendios forestales e inundaciones, permitiendo entregar ayudas tempranas a las familias afectadas.
Para ello, es necesario que quienes apliquen esta ficha, cuenten con capacitaciones especiales que les entreguen las herramientas necesarias para llevar un catastro adecuado de las afectaciones.
Este proceso de capacitación que es liderado por el Ministerio de Desarrollo Social y Familia, busca garantizar una respuesta rápida y eficiente ante emergencias necesitadas posteriores que han enfrentado miles de hogares a través de las temporadas, ya sea inundaciones, o en este caso, siniestros.
"La FIBE permite georreferenciar viviendas, identificar la composición de los grupos familiares y evaluar los daños en los inmuebles afectados, facilitando la entrega de bonos de recuperación y la planificación de futuras ayudas habitacionales", explicó un representante del ministerio.
Desde la aplicación de esta ficha, se han mejorado los tiempos de respuesta frente a catástrofes. Un ejemplo destacado ocurrió tras las inundaciones del invierno pasado, cuando más de 500 bonos de recuperación fueron depositados en tiempo récord a las familias afectadas en la comuna de Coronel.
Las autoridades recalcan la necesidad de preparar a los equipos municipales antes de que las emergencias ocurran. "Capacitamos a los funcionarios en tiempos de paz para estar listos y reaccionar ante situaciones críticas. La experiencia de incendios forestales y lluvias intensas nos ha enseñado la importancia de estar siempre preparados", señalaron.
Biobío es la segunda región del país con más personas acreditadas para aplicar la FIBE, con 1.312 funcionarios capacitados. Sin embargo, el llamado sigue siendo a fortalecer las capacidades y concienciar a la población sobre el autocuidado, especialmente ante las altas temperaturas pronosticadas para la zona, que podrían favorecer la propagación de incendios forestales.
Las catástrofes no solo generan pérdidas materiales, sino que también impactan profundamente en la salud mental de las comunidades afectadas. Prevenir incendios y actuar rápidamente no solo salva vidas, sino que también reduce el impacto emocional en las familias.
"Estamos comprometidos en trabajar junto a la comunidad para mitigar estos efectos", señaló la autoridad.
Además del llamado a la prevención, las autoridades instaron a la población a denunciar conductas que puedan derivar en incendios y a colaborar con las medidas de prevención implementadas.
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