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Bajo la visita técnica de la Agencia de Cooperación Internacional Flandes en la comuna de Nacimiento, se llevó a cabo una actividad con distintos actores de desarrollo para la presentación del proyecto "La Frontera, Territorio Creativo en la Cuenca del Río Biobío", cuyo objetivo de vincular el trabajo de los diferentes representantes como la Asociación de Municipalidades Biobío Centro, en torno a la cuenca del Río Biobío, con el fin de poner en valor su patrimonio cultural y la activación de las economías locales.
De esta forma, y buscando aunar esfuerzos, visiones, recursos y activos del territorio contiguo a la cuenca del Río Biobío, uniendo a sus comunas, localidades, su gente y su territorio; es que el coordinador del proyecto La Frontera, Carlos Guerrero, en conversación con diario La Tribuna, explicó de qué se trata y cuáles son sus principales aristas.
¿De qué trata la visita técnica de la Agencia de Cooperación Internacional de Flandes?
La visita de la Agencia de Cooperación Internacional de Flandes no es una visita nueva, son unos actores dentro de la cooperación internacional que ha tenido una historia más antigua con Chile desde el regreso a la democracia. Es una agencia que si bien no es la más grande, ha tenido una historia muy fructífera de vinculación con Chile.
En esta nueva etapa, la agencia viene nuevamente a un ciclo de cooperación, en un momento en que Chile tampoco es un sujeto de cooperación internacional por estar en la OCDE, y ciertos rasgos y ciertos indicadores que nos sacan de la cooperación.
Por lo tanto, la cooperación que establece la agencia es una cooperación un poco más horizontal, y lo que buscan en particular en esta cita a Biobío, es evaluar y de manera prospectiva analizar un proyecto que se está realizando entorno a las cuencas del Biobío que se llama "La Frontera, Territorio Creativo en la Cuenca del Río Bío Bío".
¿Por qué surge esta iniciativa?
Esta iniciativa en realidad recoge la inquietud, el sueño y la visión de muchos gobiernos locales y también de muchos actores que por muchos siglos hemos convivido entorno a la cuenca del Biobío, pero también hemos vivido entorno a La Frontera, este espacio que es delimitado y configurado en la identidad de Chile en cuatro siglos y medio.
La Frontera lo que pone en valor es este patrimonio, este legado que hemos recibido como región y como cuenca, que es el desarrollo de una narrativa y de un relato que sea capaz de visibilizar este patrimonio, pero además articulando entorno a este patrimonio que está distribuido en estas ocho o nueve comunas desde San Pedro de la Paz hasta Santa Bárbara, todas comunas aledañas al Río Biobío, y que en algún momento tuvieron fuertes o los tienen, como en el caso de Nacimiento y Santa Juana, que son fuertes republicanos que todavía están.
En el caso de las demás también tuvieron fortalezas, entonces, lo que nos interesa con el proyecto es no solo restaurar o recuperar el patrimonio físico, sino que recuperar la memoria y recuperar la identidad entorno a este espacio, que a veces es más complejo y es más difícil que recuperar lo material.
¿Qué se busca principalmente con la realización de este proyecto?
Mediante este proyecto se busca además impactar en las economías locales, hacer un tránsito de ser economías como las que hoy día tenemos en nuestras comunas, que son centradas en lo industrial y en lo forestal, transitar también a otro tipo de economía, que es la economía creativa, que finalmente logra aglutinar en sí todas estas actividades que por mucho tiempo han transcurrido de manera paralela, lo que es nuestra vida en estas comunas, como la vitivinicultura, la artesanía, la cerámica, el turismo, la gastronomía, el cine, el diseño, la arquitectura del espacio, en fin.
Todo lo que es el patrimonio, todo lo que son estas actividades de la industria creativa, y lo que busca con este proyecto es dinamizarlo y transformarlo en un nuevo motor del desarrollo económico de la cuenca, pero además de una manera muy descentralizada, apostando a las comunidades y a las localidades rurales, haciendo emerger actores que no han sido sujetos del desarrollo, sino que han sido más bien objetos de políticas públicas, pero no sujetos.
A diferencia de todos esos proyectos y de esos territorios, el proyecto de La Frontera surge desde abajo, desde los municipios, desde los actores locales que han ido engranando actores como son el Duoc en la parte académica, CMPC que tiene una gran presencia en el territorio, y a la cual se suma finalmente Flandes, que además es un actor dentro de la cooperación internacional, representa una tremenda oportunidad para el territorio nuestro.
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