Cuentas negativas para el comercio local en Día de la Madre: disminuyó en un 10% en comparación al año pasado

Después de la Navidad, el Día de la Madre es la fecha más importante para los chilenos, considerada como la segunda celebración con más ventas en el comercio.

Fecha que impulsa las ventas del comercio minorista, por lo que comerciantes locales se preparan para contar con un variado stock para la demanda de sus clientes, las que durante este tiempo ha tenido diversos cambios, que van desde las tradicionales tarjetas de saludos, flores, pasando, incluso, por regalarle una cena a sus madres, hasta los productos tecnológicos.

Pese a lo anterior, y las variadas preferencias, que pudiesen predecir que las ventas del comercio local tendrían un aumento para esta fecha.

Lamentablemente, en esta ocasión locatarios de Los Ángeles no quedaron contentos, y sacan cuentas negativas. En donde el comercio ilegal vuelve a ser la amenaza para el comercio establecido.

Al respecto, el presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo de Los Ángeles A.G., Walter Aránguiz Aldea, manifestó que “el comercio ilegal no se detiene y de igual modo se apodera de las esquinas. Poco les interesan las multas, porque las pagan sin problema, ya que los dividendos siguen siendo positivos para ellos”.

Asimismo, el dirigente gremial añadió que “tenemos evidencia de que pasan los carabineros, pasan los fiscalizadores municipales, pero ellos siguen en los mismos puntos y con mercadería, de manera que si ésta no se les requisa, para efectos de venta, ellos siguen tal cual”, concluyó.

LOS MÁS PERJUDICADOS

En lo concreto, las ventas bajaron un 10 por ciento, en promedio, respecto del año anterior, alcanzando hasta un 70 por ciento de baja para quienes ejercen como floristas.

El rubro gastronómico local fue uno de los más resentidos, debido a que conspiró el mal tiempo, el cual hizo que muchas personas desistieran, por ejemplo, de salir a comer o hacer asados al aire libre.

Otros establecimientos, como perfumerías, también acusaron baja en sus ventas, posiblemente atribuido a una incipiente reactivación del comercio, a la falta de efectivo y al aumento de ventas asociadas a otros medios de pago, como ventas con tarjetas propias de grandes tiendas.