Se podría afirmar que la cuna del nacimiento del padre de la patria, el Libertador Bernardo O`Higgins Riquelme fue Chillán Viejo y que el nacimiento de la patria, libre y soberana, fue en la hacienda San José de Las Canteras -ubicada a unos 40 kilómetros al sureste de Los Ángeles, específicamente en la comuna de Quilleco- lugar ligado a la historia de Chile y que el Libertador recibiera como herencia de su padre en el año 1804.
Según cuenta el profesor e historiador angelino Alejandro Mege, este fue un importante patrimonio de terreno con miles de cabezas de ganado, que incrementó aún más, introduciendo en la hacienda importantes innovaciones en la ganadería, apotreró, los campos, plantó viñas y frutales, aumentó la producción lechera, amplió las bodegas para guardar la producción agrícola y ganadera.
Además, construyó una casa nueva y plantó, como cuenta la tradición oral, un castaño que, a más de 200 años, se mantiene en el sitio que lleva su nombre, apoyando en la tierra sus brazos vegetales para sostener su tronco herido por el tiempo, aun dando frutos y esperando ver reconstruida la casa que acogiera al Libertador y su familia, hecho que ocurrió el año 1808 cuando se terminó de construir la casa patronal, en cuya construcción intervinieron carpinteros ingleses e irlandeses.
EL PROCESO DE INDEPENDENCIA
Mege, sostuvo que no se ha dimensionado adecuadamente la importancia que la hacienda Las Canteras tuvo en la vida de O`Higgins y en el proceso de la Independencia.
“El padre de la Patria, que siempre tuvo una vida modesta y una subsistencia económica precaria, el legado de su padre le dio estabilidad económica y pudo disponer de bienes que le permitieron hacer florecer y materializar los ideales de independencia que albergó desde muy joven por la tierra en que nació, y no solo de su amada patria, como siempre expresaba, sino que de los países al norte del Río Bravo, sin cuya liberación, la de Chile sería solo una quimera”, afirmó Mege.
Asimismo, continúa asegurando que O`Higgins, que no era un hombre de armas, que se sentía más agricultor que soldado, desplegó en Las Canteras una fructífera actividad agrícola y ganadera, modificó los sistemas de siembras mediante el uso racional y rotativo del suelo aumentando la productividad de sus tierras, con la introducción de técnicas aprendidas en Europa, como el uso del arado de hierro.
El aporte de O`Higgins a la modernización de la agricultura y la ganadería le mereció el reconocimiento de la Sociedad de Agricultura de la época entidad que le hizo llegar un diploma cuando se encontraba exiliado en el Perú.
LA BONANZA DE LAS CANTERAS
La prosperidad de Las Canteras llegó a su punto máximo alrededor de 1810, beneficiando también a sus inquilinos y, junto a ello, las buenas relaciones con los jefes indígenas vecinos de Las Canteras, a los cuales recibía con frecuencia en su casa. Todo ello, sin dejar por un minuto de pensar en la libertad de su patria.
Desde las tierras de Las Canteras y con el respaldo material que ésta le proporcionaba proyectó su sueño de un Chile y una América libre.
Así, junto con diseñar todo un plan para el proceso de emancipación, colocó todo su patrimonio familiar a la causa de la independencia, proponiendo la idea de crear dos regimientos de caballería e infantería, así como la creación de un Congreso Nacional, para la consolidación de un gobierno independiente.
Concretó uno de ellos con la ayuda de un propietario, vecino de Las Canteras, Pedro Ramón Arriagada y con inquilinos de sus fundos y financiado con sus propios recursos, en 1810, dieron forma al 2º Regimiento de Caballería de Milicias Disciplinadas de La Laja, que se denominaría Lanceros de la Frontera y se le otorgó a O`Higgins el mando con los despachos de Teniente Coronel.
SU CAÍDA
Como consecuencia de la guerra por la independencia la gran y próspera estancia de Las Canteras fue arrasada, saqueada y quemada por las fuerzas realistas y su madre y hermana fueron tomadas prisioneras.
Según explicó Mege, así lo narra Barros Arana, en 1815, la hacienda Las Canteras era “solo un campo yermo y solitario, que se consideraba como sin dueño, y en que cualquiera se arrogaba el derecho de cortar madera o echar a pastar sus ganados…”
Es posible pensar que sin la hacienda Las Canteras que le dio a O`Higgins la estabilidad económica y la posibilidad de participar de manera activa y liderar el proceso de la independencia, así como la modernización de la agricultura y el mejoramiento de la producción ganadera y sus productos, poniendo al servicio de la causa todos sus bienes, la historia bien pudo haber sido distinta y por eso la importancia que tiene la hacienda Las Canteras debe ser reconocida en su exacta dimensión.