Opinión

Es mañana...

Psicólogo

luis rozas m,
luis rozas m / FUENTE:

Piensa en lo siguiente; ¿Qué pasaría si mañana fuera tu último día de vida?, seguro que ni ha pasado por tu mente, por lo que es difícil imaginar la respuesta, ya que en lo cotidiano, vemos la muerte como algo lejano, que le pasa a otros, pero a nosotros todavía no y aunque no lo parezca, abordar con seriedad ese pensamiento fatal, puede arreglarte la existencia.

En verdad, hablar del fin de nuestro tiempo no debiera ser un tema complejo, más aún cuando todos partiremos de este mundo en algún momento, más cuando cada segundo transcurrido, hace avanzar el reloj lentamente hacia nuestro fin, nos apagamos de a poquito, lo que pasa es que no nos queremos dar cuenta.

Si al leer la pregunta inicial, sentiste angustia, preocupación o bien culpa por cosas pendientes o sueños guardados en el olvido, te hará bien leer lo que escribí, ten presente que no existe una fórmula perfecta para la partida, pero si quieres sentirte bien cuando llegue ese instante, lo más sano para no tener arrepentimientos, es vivir el presente con mucha intensidad y presta atención a las siguientes claves.

Ocúpate de vivir la vida que querías e idealmente la vida que soñaste; toma decisiones valientes, no tienes que hacer o dejar de hacer cosas para darle el gusto a los demás, regálale a ellos la oportunidad de ocuparse de sí mismos.   Recuerda, tú estás construyendo tu sueño personal, date cuenta que tienes el deber y el derecho de disfrutarlo.

La pregunta es... ¿Trabajar para vivir o vivir para trabajar?, si bien es cierto desarrollar una determinada labor, para recibir un salario es importante en la supervivencia, los extremos nunca fueron buenos, te recomiendo que no trabajes tanto, date tiempo para ti y nunca pierdas de vista que el trabajo es "solo una actividad más", hoy estás y mañana te reemplazan, enfócate en tu bienestar.

No te guardes nada, aprende a gestionar tus emociones y a expresar libremente tus sentimientos, ¿Cuántas veces te postergaste? o te dijiste a ti mismo...en otro momento, mejor que no, lo diré más tarde, no se lo daré a conocer porque se enojará, ¡basta de eso!,  libera tus emociones, transita con el alma limpia y la conciencia liviana, sé autentico, sé tú mismo, sin dobleces.

Nunca pierdas el contacto con tus amigos, rodéate de la gente que te hace sentir bien, la que se preocupa sinceramente por ti, que te acepta, no por lo que tienes, sino por la persona que eres. Es muy importante que no dejes de socializar, porque cada vez que lo haces te renuevas, te ayudas y más aún, puedes ayudar a otros, recuerda esto... cuando tú estés necesitado de auxilio, siempre será bienvenida una mano amiga.

Permítete y regálate a ti, la oportunidad de ser lo más feliz posible, conócete a ti mismo, come cosas ricas, viaja, duerme lo suficiente, haz actividades placenteras, trata de estar siempre listo para lo nuevo, en resumidas cuentas, se dinámico y no estático, allégate a todo lo que dibuje una sonrisa en tu corazón.

Mantén siempre el equilibrio, cuida tu cuerpo ya que ahí habita tu mente, nunca dejes de hacer actividad física, aprende un oficio, duerme a diario con tu conciencia limpia y liviana, eso lo lograrás siendo empático, bien intencionado, solidario y haciendo el bien desinteresadamente, lo bueno llama a lo mejor.

Tal como ya lo expresé, no existe una única manera de vivir bien la vida, probablemente si mañana fuera tu último día, te hubiera gustado haber cumplido con gran parte de lo que he plasmado con anterioridad, pero la buena noticia es que aún estás a tiempo... sí lo puedes hacer, lo tienes y has tenido tan cerca, que no lo viste.

Finalmente, no te olvides que tú eres el protagonista de esta historia, si quieres mirar hacia atrás sin arrepentimientos, aprende a amarte, decide sin culpa por lo que te haga feliz, establece límites para proteger tu estabilidad y crea hoy, la vida que ayer soñaste...es posible, de ti depende... piénsalo y ¡Que tengas un maravilloso día!

Luis Rozas Mardones, psicólogo.

Etiquetas:




matomo