Pudiste leer cualquier cosa, pero si llegaste aquí es por algo... creo que no lo has pasado bien últimamente, te cuestionas y se ha ido de tu horizonte la motivación que antes tenías. Estás cansado, lo sé, pero recuerda que la vida es una montaña rusa, a veces estás en la parte alta, donde reina la adrenalina, alegría o los buenos momentos y otras en la parte baja, que interpreta justamente lo que viviste o estás viviendo, el problema es que vas en un carro con los ojos cerrados y no hay tiempo para prepararse, ni para ensayar, solo tienes que vivir el recorrido.
Valora todo lo que tienes y no me refiero a lo material, sino que a todas tus cualidades únicas. No sé si te lo han dicho, pero tienes un corazón precioso, moldeado a hierro y fuego, no des por terminada la batalla diaria, sigue adelante, porque cada momento adverso o injusto que has vivido, la traición, el desamor, la vuelta de espalda cuando más lo necesitas o cuando sufriste en silencio (sin que nadie se enterara), han hecho nacer a tu versión dorada y atento que mañana puede ser aún mejor.
Si quieres atraer lo bueno, lo primero que debes hacer es confiar en ti, mírate, ¡brillas! e iluminas no solo tu camino, sino el de la gente que te quiere y valora. Te has convertido en un ser humano de excelencia y aunque recibas menos de lo que das, no te canses de ser el bueno de la película, la vida es de ida y vuelta, todo lo que entregas, vuelve más temprano que tarde a su remitente.
Me da gusto escribir estas líneas para ti, te conozco más de lo que te imaginas, siéntete orgulloso de tu esencia y consecuencia, no importa que no te entiendan, que te critiquen o que te tachen de tonto, tú sigue siendo único, ¿Cuántas veces has estado destruido?, pero sin embargo dices acá estoy, esbozas una sonrisa, regalando lo que no tienes o lo poco que te quedaba... te admiro, el futuro es tuyo, ya nada te detendrá, cosas buenas vienen para ti en camino... confía.
Si te lo propones, seguro que lo lograrás, si no puedes hoy... seguro que mañana podrás, si hoy fue un día malo... mañana será mucho mejor, si hoy no está la paz, la felicidad, el amor o la fortuna... no temas, llegarán multiplicadas, te mereces todo lo bueno, bonito y sano que la vida te puede entregar, no cambies nunca y valora tu humilde existencia.
Date la oportunidad de pasar ese trago amargo y no planifiques a largo plazo, disfruta del ahora, créete el cuento y deja de minimizarte o de tratarte mal hasta con los pensamientos; regálate un respiro, come tu comida favorita, camina por el campo, salta, juega, ríe, rodéate de los que te hacen bien, sigue siendo tú. El tiempo solo va hacia adelante, por eso saca del cajón las alas que tuviste que guardar, mientras cuidabas el vuelo de alguien más, ya es hora de usarlas.
Finalmente piensa en esto, no importa que pasen los años, eres como el buen vino, mucho mejor con el tiempo, envejecer te queda perfecto. A ti las canas o las arrugas no te han convertido en la persona que debiste haber sido desde el principio, tú naciste con una esencia especial y un propósito de bien que has seguido sagradamente, eres el motor que mueve los sueños propios y ajenos, deseo que lo bueno te busque, te encuentre y se quede contigo para siempre. ¡¡Que tengas un maravilloso día!!
Luis Rozas Mardones, psicólogo.