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Columnista

Ecuador y Chile, ¿lo mismo?

Mario Ríos Santander

por Mario Ríos Santander

"Lo que ocurre es que las guerras civiles, aquellas que surgen en poblaciones de una misma nacionalidad, han sido y son dramática por cuanto la vinculación de sangre, historia, de lugar, terminan sobrepasando cualquier odio existente...". Me comentaba mi amigo Raúl Méndez, filósofo destacado, académico y "curador" de la doctrina de Chile en años pasados. "Lo único que me hace suponer que puede producirse una suerte de guerra al interior de una nación como la chilena, es que El Mercurio nos anuncia que en las cárceles del norte, el 50% de los detenidos, todos por actos criminales, son extranjeros. Y claro, como no es necesario usar uniforme para ir a la guerra, (es lo que han hecho los "soldados-sicarios"), pero sí necesitamos fronteras, podemos afirmar que técnicamente estamos frente a una sociedad, la chilena, repleta de fronteras interiores, ubicadas en barrios, regiones, completas, áreas de conflicto, algunos simplemente criminales, otros étnicos, que van llevando al país a enfrentamientos de un nivel que se acercará a la guerra interna".  Luego, recordaba un buen ejemplo. Bukele, en El Salvador. "Bukele, inició claramente una guerra interna en El Salvador. Es cierto que hubo previamente una determinación policial en asuntos propios de los delitos en que la policía actúa, pero, a poco andar, observó que el enfrentamiento iba a ser algo más que una ‘emboscada policial’ en barrios diversos, en realidad, se asomaba una guerra interna. Pidió al Congreso, potestades especiales y el resultado, hasta hoy, es que ha detenido a 74 000 "enemigos", concluyendo en un triunfo militar interior, policial y político cuya magnitud, cruza hoy la totalidad de las fronteras latinoamericanas".

¿Estamos camino a Ecuador? Claramente sí. Cuando la señora Bachelet y luego Piñera, ambos en sus segundos mandatos, ("Nunca son buenas las segundas partes") abren las puertas de Chile, (Bachelet por conquistar la oficina de DDHH en la ONU y Piñera porque no es inteligente), el "enemigo" no organizó la unidad militar que correspondía. Lo que hizo fue organizar una empresa aérea que traería en vuelo y aterrizando a las 3 de la madrugada en Pudahuel, a cientos de miles de "migrantes", sin exigencia alguna, y todos mintiendo. Con pleno conocimiento de tales mentiras, ("somos, turistas, ya tenemos contrato de trabajo, otros"), la policía chilena, arrinconada entre órdenes presidenciales y hordas humanas que las traían gratis a nuestro país. Fueron 516 aterrizajes nocturnos. Luego Piñera, en la máxima estupidez, levantaba los brazos en Cúcuta, Colombia, y proclamaba a Chile como "destino de todos los que quisieran una patria mejor". Y llegaron cientos de miles. Hoy el Gobierno argentino señala: "toda la droga que ingresa a Argentina viene de Chile". Dramático y estúpido. La autoridad, en cualquiera de sus niveles, no reacciona. Chile se repleta de basuras diferentes, corrupción en todos los niveles, se denuncian pero no hay respuestas. Reitero, ¿caminamos a lo que es Ecuador, El Salvador y la propia Argentina, todos enfrentando una guerra interna?  Sí. Sostener lo contrario es aplaudir esta noticia de cárceles repletas de "migrantes" delincuentes, asesinos, ladrones, sicarios... toda una fauna humana que descubrió a un país, Chile, que tiene el mejor equipo jurídico para que los defiendan y gratis.

Mario Ríos Santander     

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