Escuela La Capilla devastada por millonario robo de equipos: Delincuentes fueron 'dateados'

Este domingo 21 de enero, la Escuela Básica G-895 "La Capilla", distante 15 kilómetros al poniente de la ciudad de Los Ángeles, fue víctima de un cuantioso robo. Los antisociales se llevaron múltiples equipos tecnológicos que eran vitales para el funcionamiento de la escuela.

Diario La Tribuna tomó contacto con César Torres Arroyo, director de la escuela hace tres años, luego de publicar un comunicado en redes sociales, donde se detallan los artículos robados por cuatro antisociales.

En los registros, la imagen más elocuente muestra a uno de los delincuentes en el pasillo del recinto. En sus manos parece llevar un fierro, seguramente para forzar las puertas. Usa una mascarilla quirúrgica para ocultar su rostro. El gorro de la casaca cubre el resto de la cabeza.

En el detalle de lo sustraído se cuentan cuatro pizarras digitales de 65 pulgadas, tres fotocopiadoras multifuncionales, dos mesas de amplificación, notebooks, tablets, tabletas digitales, televisores, parlantes, instrumentos musicales, microscopios, uniformes y calzado destinado a los estudiantes, incentivos para los estudiantes, cámara profesional, piano electrónico, amplificadores, entre otros.

Torres relató que el robo fue perpetrado a la 1 de la madrugada cuando cuatro delincuentes ingresaron al recinto, luego de forzar un candado. Lo primero que hicieron fue ir a la oficina donde estaban las cámaras de vigilancia de la escuela para desactivarlas, pero igualmente dejaron registro. "Ellos creyeron que dejó de funcionar, pero siguió operativo. Sacaron la pantalla de las cámaras", cuenta el director.

César Torres asegura que los delincuentes "iban bien preparados, porque rompieron chapas y las puertas metálicas. Las chapas eran de súper buena calidad y las protecciones tenían candado".

Al cabo, ingresaron al laboratorio de computación, la biblioteca, sala de profesores, sala PIE, comedor, cocina, oficina administrativa, bodega de deportes. "En realidad ingresaron a prácticamente toda la escuela y juntaron la mayor cantidad de objetos de valor", reconoce.

Las cuatro pizarras digitales y las fotocopiadoras multifuncionales eran usadas para preparar el material para los estudiantes, explica el directivo educacional porque no piden útiles a los alumnos, sino que es la misma escuela la que facilita todos estos recursos. "Ahora nos dejaron de brazos cruzados porque no tenemos cómo multicopiar el material, no tenemos cómo entregárselos a los niños", se lamenta el docente.

Sustrajeron además varios notebooks, impresoras, datas y tablets que eran de uso exclusivo de los estudiantes. "Se llevaron material que nosotros les entregamos como ayuda social a los niños. Teníamos stock de uniformes y de zapatillas, cuando ellos lo requerían nosotros lo íbamos entregando. También nos dejaron sin los regalos que da la municipalidad, los que almacenábamos en la escuela y serían entregados a los estudiantes cuando ellos volvieran a clases".

Otras de las especies que los antisociales robaron incluyen el equipo de amplificación que la escuela usaba para sus actos cívicos (parlantes, atriles, entre otros).

AUXILIAR DE VERANO DIO AVISO

El director relata que en periodo de vacaciones, la escuela contrata una auxiliar quien llegó el lunes (22 de enero) en la mañana a cumplir sus funciones. Ahí se percató que la entrada había sido forzada: "Ella me llama y lo primero que le dije fue que no tocara nada. Fui hasta la escuela, llamé a Carabineros y poder realizar la respectiva denuncia. Al llegar y revisar las dependencias nos encontramos con la mala sorpresa de que estos tipos habían roto todas nuestras chapas y muebles. Para entrar por ejemplo al laboratorio de computación, rompieron las puertas. Hicieron mucho daño".

"Las cámaras están distribuidas en toda la escuela, pero el control está en la oficina administrativa y ellos se fueron directo a ella (...) Creemos que los delincuentes entraron ‘dateados’ y sabían dónde estaba el sistema de grabación. El error que cometieron es que dejaron el DVR, que es el aparato que graba", puntualizó el director.

AVISAR A CARABINEROS O PDI SI SE ENCUENTRAN LAS ESPECIES EN VENTA

Desde la escuela se han preocupado por mantener a sus estudiantes al mismo nivel que cualquier otro establecimiento. Incluso, adquirieron equipo de última tecnología para entregarles educación de calidad a los niños. "En diciembre nos llegaron justo estas pizarras digitales, que es lo último que se está utilizando en educación y nos robaron las cuatro. Tres nuevas y otra que teníamos en uso".

Por lo mismo, solicita que "si la comunidad se entera de que están vendiendo estas pantallas que parecen televisores de 65’, que avisen a Carabineros o a la Policía de Investigaciones para tratar de recuperar estas especies. Lo mismo con las fotocopiadoras que son fundamentales para nuestro establecimiento y para el servicio educativo que nosotros entregamos".

Debido a los altos costos de los equipos robados y la llegada de una nueva temporada escolar, la Escuela La Capilla deberá redistribuir los recursos presupuestados para todo el año a fin de reponerlos.