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En una decisión relevante, el Juzgado de Garantía de Arica ha dado luz verde para la exhumación del cuerpo de Franco Vargas, un conscripto que falleció el pasado 27 de abril tras una instrucción militar en la comuna de Putre, en la Región de Arica y Parinacota.
La solicitud de exhumación fue presentada por la Fiscalía de Arica, y el fiscal jefe, Anatole Larrabeiti, explicó que la autopsia debe realizarse siguiendo los protocolos establecidos en el Protocolo de Minnesota.
Este protocolo, basado en tratados internacionales y normativas vigentes, establece requisitos específicos para la autopsia en casos de fallecimiento de personas bajo custodia estatal.
Según Larrabeiti, la autopsia debe considerar posibles lesiones previas al deceso y cualquier otra anomalía relacionada con la muerte. En este caso, el Ejército de Chile tenía la custodia del conscripto mientras cumplía su Servicio Militar, y su fallecimiento se produjo bajo estas circunstancias.
En tanto, la madre de Franco Vargas, Romy Vargas, también autorizó la diligencia. Durante la audiencia, la jueza accedió a la petición del Ministerio Público, argumentando que la exhumación es fundamental para esclarecer los hechos investigados. La manifestación expresa de voluntad por parte de la madre y los presupuestos legales establecidos respaldaron la decisión del tribunal.
Una vez completadas las diligencias, se procederá a la nueva sepultura del cadáver. Esta medida busca arrojar luz sobre las circunstancias de la muerte de Franco Vargas y garantizar la transparencia en el proceso judicial.
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