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El tránsito por las calles de Los Ángeles en las horas peak puede ser extremadamente lento. Hay que armarse de mucha paciencia para ir avanzando por la ciudad, debido a que la gran cantidad de vehículos satura las avenidas y calles.
Sin embargo, esa condición fue un factor determinante para capturar a tres asaltantes que después de cometer un atraco, quedaron atrapados en el embotellamiento cuando escapaban.
La situación ocurrió este miércoles, cerca de las 18,30 horas. Los apresados son tres hombres quienes fueron interceptados por las fuerzas de Carabineros cuando se desplazaban por la calle Lynch, entre Los Carrera y Freire, en el radio céntrico de la ciudad.
Los delincuentes habían asaltado a un hombre en la avenida Ricardo Vicuña a punta de pistola. Lo golpearon en varias ocasiones en la cabeza para robarle sus pertenencias e incluso le dispararon desde el vehículo usado en la huida, afortunadamente sin lograr impactarlo.
Pero cometieron un error: Tuvieron la mala ocurrencia de escapar por calle Balmaceda hacia el sur y luego tomar por la avenida Gabriela Mistral hacia el poniente. En ese avance llegaron a Lynch donde el tráfico les impidió avanzar con rapidez.
Fueron siete minutos en que la víctima denunciada el asalto hasta que los tres delincuentes estaban en el suelo, esposados y a disposición del numeroso contingente de Carabineros que salió en la persecución del vehículos. Hay registros de video grabados por los residentes que captaron el momento en que los asaltantes eran reducidos y arrestados por efectivos de la patrulla Foco de la Prefectura de Carabineros, unidad creada para responder con la mayor prontitud posible cuando se producen los hechos delictuales.
Durante la revisión del vehículo, los efectivos policiales encontraron un revólver operativo con el número de serie borrado, cargado con seis cartuchos, uno de ellos percutido que correspondería al disparado en contra de la víctima. También se incautaron seis cartuchos adicionales, un arma de fantasía tipo pistola y las pertenencias robadas.
En la jornada de este jueves, los tres detenidos pasaron a control de detención de formalización de cargos en el Juzgado de Garantías de Los Ángeles. La fiscalía les imputó a todos los delitos de robo con violencia y amenazas, y a dos de ellos los de porte ilegal de armas y municiones y disparos injustificados.
Al cabo, la jueza consideró que existían antecedentes suficientes para presumir su participación en los delitos y determinó que su libertad representaba un peligro para la seguridad de la sociedad.
Por lo mismo, los tres quedaron en prisión preventiva en un recinto carcelario de la zona la espera que se recopilen más antecedentes para su juicio y condena.
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