En el marco de la polémica investigación por la fallida compra de la casa del expresidente Salvador Allende, tanto la ministra de Defensa, Maya Fernández, como la senadora socialista Isabel Allende, decidieron guardar silencio tras ser citadas a declarar como imputadas.
La causa, liderada por el fiscal regional de Coquimbo, Patricio Cooper, ha generado revuelo en el ámbito político. Este jueves, Fernández compareció vía Zoom para su declaración, mientras que su tía, Isabel Allende, lo hizo este viernes a las 09:00 horas.
Ambas optaron por utilizar su derecho legal a no responder preguntas, según indicó la abogada de Fernández, Paula Vial Reynal.
En la misma causa también está implicada la exministra de Bienes Nacionales, Marcela Sandoval, quien deberá presentarse ante la Fiscalía en las próximas horas. Cabe recordar que Sandoval presentó su renuncia el pasado 6 de enero, tras ser señalada como involucrada en los hechos investigados.
Una denuncia que remeció la política nacional
El caso tuvo su origen en una denuncia presentada por la Fundación Fuerza Ciudadana, liderada por Raimundo Palamara, abogado y militante del Partido Republicano. Según se detalla, la denuncia apunta a un posible fraude al fisco, cuyo avance dependerá de la revisión de evidencia y las declaraciones recabadas.
Palamara criticó duramente la decisión de la ministra Fernández de guardar silencio, calificándola como "contraria a los estándares de transparencia y probidad que se esperan de una ministra de Estado".
Además, cuestionó que Fernández siga ocupando su cargo, argumentando que "su posición está generando un grave perjuicio a las instituciones y a la credibilidad del país".
