Barceló califica de "encerrona" tensión vivida por Bachelet en Tedeum evangélico

En duros términos el gobernador de la provincia de Biobío, Luis Barceló, se refirió al difícil “trance” que la Presidenta Michelle Bachelet vivió durante el Tedeum de las Iglesias Evangélicas.

“Todo lo que sucedió es un tema muy desagradable, rompe todas las normas vistas en los últimos años en la República en cuanto a decencia y buen trato hacia la persona y hacia la figura de un Presidente de la República”, partió señalando la autoridad provincial en entrevista concedida a Radio San Cristóbal.

Según el jefe provincial, lo sucedido con la mandataria en dicho acto ecuménico, “es un rotura de todas las normas de buena convivencia y de buena crianza que hacen de Chile una república ejemplar”, sostuvo.

El gobernador de Biobío dijo que espera una condena por parte de las autoridades del mundo evangélico hacia las palabras emitidas durante el Tedeum por Eduardo Durán, hijo del reconocido obispo del mismo nombre y candidato a diputado por Renovación Nacional (Chile Vamos), quien criticó la agenda valórica impulsada por Bachelet en las últimas semanas.

“Utilizó el púlpito no para defender valores como él dice, sino que para hacer una campaña de proselitismo político. Yo condeno abiertamente estos usos y malas costumbres que se dieron desafortunadamente en la Catedral Evangélica Metropolitana”, opinó Barceló.

“No sé que representación tendrá este señor Durán dentro de lo que es el mundo evangélico, a lo mejor no tiene ninguna o la que tiene es muy pequeña”, agregó a su crítica la autoridad de Biobío.

“Lo lamentable es que teníamos a dos candidatos a Presidente de la República ahí y ninguno de ellos fue capaz de solidarizar con la institución de la Presidencia de la República, ni siquiera digo con la Presidenta (…) y uno de ellos llegó a decir que valoraba la forma en que los evangélicos defendían sus valores”, añadió en alusión a José Antonio Kast.

“Eso es horroroso, porque eso quiere decir que él avala las roterías, porque lo que se hizo es un rotería, avala los malos modos y debería leerse el señor Kast el Manual de Carreño y, por supuesto, el señor Durán”, sentenció el gobernador.

Barceló consideró finalmente que lo sucedido en el Tedeum con la Presidenta fue algo orquestado. “Era muy difícil prever esto, porque estamos en presencia, se supone, de una iglesia protestante que tiene algún grado de organización interna y que, se supone, si se invita a la Presidenta de la República a un acto republicano, tradicional, que forma parte de los rituales del Estado, en los cuales hay ciertos marcos en que se puede hacer críticas que se han hecho siempre, pero guardando las formas diplomáticas mínimas (…) yo veo que esto fue una verdadera encerrona”, concluyó.