Salud

Los efectos a nivel dermatológico que podría provocar el humo 

Tras diversos focos activos que se han combatido en la provincia de Biobío, es importante reconocer las posibles alteraciones en la piel producto de los componentes del humo.

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Los efectos del humo en términos respiratorios son parte de los síntomas comunes por exposición a los incendios forestales. Sin embargo, estas no son las únicas afectaciones, y parte de las de mayor gravedad se encuentran en la piel. 

La provincia de Biobío, y por sobre todo su capital Los Ángeles, fue cubierta por el humo y altas temperaturas durante 15 días aproximadamente, causando complicaciones de salud a sus habitantes, que si bien no todos se encontraban en el sitio de los siniestros, fueron alcanzads por los efectos colaterales. 

El humo está compuesto por una mezcla de gases y partículas finas que se emiten cuando algo se quema. Generalmente esto puede afectar los ojos, la piel y sobre todo los pulmones cuando son inhalados profundamente, causando problemas respiratorios. 

En lo que respecta la piel, parte de las principales consecuencias se deben precisamente a estas “micropartículas”, ya que tienen la capacidad de ingresar al cuerpo, pasar por el torrente sanguíneo y afectar las capas más profundas de la piel, al igual que las superficiales, por ejemplo, con altas cantidades de ceniza. 

PRINCIPALES CONSECUENCIAS EN LA PIEL

- Mayor frecuencia de aparición y empeoramiento de brotes de acné. 

- Enfermedades con deterioro de la piel como psoriasis, eccemas y dermatitis atópica.

- Enfermedades inmunitarias

- Sequedad y descamación de la piel

- Envejecimiento prematuro

- Generación de tumores cutáneos (a largo plazo)

- Alteraciones en la composición bacteriana de la piel

- Irritación del cuero cabelludo como caspa y descamación e incluso caída del pelo

¿CUÁLES SON LAS PRINCIPALES RECOMENDACIONES PARA MINIMIZAR ESTOS EFECTOS?

En primer lugar, el lavado del rostro. Este debe realizarse con jabones neutros y suaves, evitar todo tipo de componentes abrasivos. Aplicar cremas hidratantes adecuadas para el tipo de piel, usar protección solar adecuada, priorizando mayor factor FPS y bloqueadores dermatológicos en caso de ser necesario; ropa y lentes de sol apropiados para las altas temperaturas, tener una alimentación liviana, tomar mucha agua y, por supuesto, evitar áreas de exposición al humo, como salir a la calle de forma innecesaria en estado de emergencia ambiental. 

Otro de los puntos importantes se refiere al uso de mascarilla. Si bien por medidas Covid ya no es obligatorio su uso en espacios abiertos, su utilización es vital para evitar los efectos del humo en situaciones de emergencia. 

En caso de sufrir cualquier manifestación tópica, la recomendación es siempre asistir al dermatólogo por si presenta cualquier problema en piel, mucosa o uñas. Recibir una atención especializada sobre los cuidados de la piel, es vital para su salud y la de su familia.




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