Dentro de la historia criminal en Chile, los delitos perpetrados por funcionarios por Carabineros son muy inusuales. Y más infrecuente es que dichos delitos sean cometidos usando el uniforme institucional.
Ese antecedente fue el que concitó la atención durante el juicio oral en contra de Jorge Sebastián Rebolledo Martínez, efectivo de la policía uniformada que cumplía funciones en la Tenencia de la localidad de Pemuco, en la vecina Región de Ñuble.
Los delitos fueron cometidos en el camino a Nacimiento, a la altura del sector Arrayán (al poniente de la comuna de Los Ángeles), el 11 de julio, el 7 de agosto y 14 de agosto de 2014. Una torpeza de su parte permitió ubicarlo, incluso con una fotografía.
Pese a la gravedad de los crímenes, solo fue condenado a cinco años y un día de presidio por los tres delitos.
El 19 de octubre de 2023 su nombre volvió a salir a la palestra, esta vez por ser el principal sospechoso del brutal crimen de la estudiante María Jesús Troncoso. La propia víctima, poco antes de fallecer, entregó el antecedente que permitió capturar a su victimario: dijo que había sido su vecino, a quien conocían como "El guatón". Jorge Rebolledo Martínez fue inmediatamente detenido, fue imputado por el delito de robo con homicidio.
Tomando en cuenta las circunstancias del crimen y los antecedentes delictuales previos del ex carabinero, ahora arriesga la máxima condena del sistema penal chileno: Cadena perpetua calificada, es decir, podría permanecer recluido por 40 años antes de pedir algún beneficio carcelario.
EL EX CARABINERO
Jorge Rebolledo Martínez, hijo de una familia acomodada (su padre era gerente de una importante entidad bancaria) llevada dos años siendo parte del cuerpo de Carabineros de Chile. Después de cumplir con el periodo de formación, su primera destinación fue en Alto Jahuel, en la región Metropolitana, y hacía seis meses que estaba asignado en la Tenencia de la apacible localidad de Pemuco.
Justamente ese traslado motivó que viajara de manera más recurrente a su casa familiar en el kilómetro 7 del camino a Nacimiento. También para ver a su pareja y el hijo pequeño.
Sin embargo, esta condición fue la que usó para perpetrar los tres delitos por los cuales fue llevado a juicio oral en junio de 2015.
Se movilizaba en una camioneta D21 de color verde en la cual ofrecía trasladar a las personas que encontraba en el camino. Pero no cualquiera sería su víctima: los tres casos que llegaron a la justicia corresponden a mujeres jóvenes que estaban solas, a plena luz del día.
Ninguna de ellas sospecharía que el conductor que gentilmente se ofrecía para llevarlas en su camioneta, sería su asaltante. En un caso, intimidó a su víctima con un arma de fuego. Con otra fue más violento: la amenazó con un cuchillo y le causó heridas cortantes en los brazos.
Sus víctimas tenían ante sí a un joven de entre 25 y 28 años, correctamente bien vestido, con su pelo muy corto. Incluso, en el primer asalto, la mujer repara en que viste indumentaria policial y le pregunta en qué unidad está asignado, a lo que él responde que en Los Ángeles.
DELITO
Su primer delito fue perpetrado el día 11 de julio de 2014, pasado el mediodía. La víctima subió a la camioneta y cuando llegó a destino, ella se bajó, momento que aprovechó el hombre para irse con su cartera que tenía dinero, la documentación, un celular y una cámara fotográfica marca Nikon, todo avaluado por la víctima en la suma de 500 mil pesos.
El segundo hecho sucedió el 7 de agosto, alrededor de las 13:40 horas, el imputado. De nuevo, el ex carabinero ofrece trasladar a la víctima en la camioneta en el sector camino público San Francisco. A poco de llegar, la intimida con un arma de fuego y le exige entregar la cartera, con su celular y la billetera con la documentación.
Una semana después, el día 14 de agosto, trasladaba a la mujer en la misma camioneta en el camino público San Francisco. La amenaza con un arma blanca que la cual coloca a la altura del cuello, se produce un forcejeo hasta que le quita la cartera con varias especies. La víctima resultó con contusiones múltiples de muñeca al tratar de defenderse.