Regístrate Regístrate en nuestro newsletter
Radio San Cristobal 97.5 FM San Cristobal
Diario Papel digital
La Tribuna

Corma llama a romper el mito sobre incidencia de plantaciones forestales en la propagación de incendios

por Alejandra Sánchez

La Corporación Chilena de la Madera entregó una serie de antecedentes que esclarecerían las dudas existentes sobre este tema.

03-02-2017_18-19-088Y9 /

Dentro de toda esta catástrofe incendiaria se habla de una posible incidencia de las plantaciones forestales en la propagación de los incendios que afectan a la zona centro-sur del país.

Para aclarar esta situación, desde la Corporación Chilena de la Madera (Corma) se entregó una serie de antecedentes que esclarecen las dudas y  mitos existentes sobre ese tema.

“Ante los graves incendios que han afectado con fuerza la zona central de Chile, algunas voces  se han levantado entregando información tergiversada, sin sustento técnico, sobre aspectos que tienen que ver con el sector forestal, por lo que nos ha parecido oportuno entregar estos antecedentes para que se disponga de información fidedigna al respecto”, señalan. 

La corporación detalló que el 99% de los incendios en Chile se producen por causas humanas; la intencionalidad es de un 32% (promedio de los últimos 15 años), aunque en fechas más recientes ha llegado al 40%, según Conaf.

A pesar de lo anterior, no existen programas de educación en la población para prevenir los incendios, lo que debiera ser un tema importante.

A ello se añade que las condiciones climáticas extremas se han acentuado en los últimos años, con largos periodos secos, altas temperaturas, baja humedad y fuertes vientos.

Por ello, las posibilidades de que al producirse un fuego este se transforme en un incendio de grandes proporciones son altas. “Son estos los principales factores que están detrás de la propagación de los incendios en las zonas de interfaz, y no como se escucha en algunas voces que señalan que las plantaciones forestales son las causantes y por ello hay que eliminarlas”, indicó Corma.

PINO Y EUCALIPTO EN JAQUE

Desde la entidad maderera subrayaron que “es incorrecto, y así lo señalan los expertos, que las especies exóticas (pino y eucalipto) sean especies pirogénicas; estudios demuestran que hay especies nativas que son más inflamables que estas dos”.

A ello se agrega que Guillermo Julio, profesor de la Facultad de Ciencias Forestales de la Universidad de Chile y director del Laboratorio de Incendios Forestales, ha dicho que “es errado pensar que una eventual reforestación con especies nativas para reemplazar a las plantaciones de eucaliptos podría generar un ambiente más húmedo en el centro del país, el que permitiría mitigar la propagación de incendios”.

Agregó que “la vegetación nativa de la zona central de Chile, que es donde se han focalizado los incendios, es del tipo esclerófilo, que crece en climas semiáridos, y está conformada por pastizales, matorrales y arbolado, con diversas especies que poseen un poder calorífico y potenciales de ignición e inflamabilidad tan altos o superiores al del eucalipto”. 

También dice que “se constata un profundo error en las informaciones que se emiten en el sentido de que el carácter de especies ‘pirogénicas’ que se atribuyen a los eucaliptos y pinos conlleva procesos de autocombustión y la generación de encendidos de focos que posteriormente se transforman en propagaciones del fuego. Este fenómeno no está comprobado en la práctica ni tampoco científicamente, y además no está registrado en las estadísticas oficiales de causalidad de incendios forestales”.

VEGETACIÓN LEÑOSA

Por otra parte, desde la corporación se sostuvo que la existencia de vegetación leñosa, ya sea de especies nativas o exóticas, aledaña a centros poblados, es un riesgo de propagación de incendios, sin diferencias. 

En ese sentido, Corma agregó que el director de Conaf fue explícito al señalar ante la Comisión de Agricultura del Senado: “técnicamente no se puede hablar de especies pirogénicas, porque todo bosque que está cerca de lugares poblados requiere de tratamiento, independientemente de las especies vegetales que contenga”.

En esa misma línea, previno que no es una característica exclusiva de las plantaciones exógenas el ser altamente combustible, ya que entre las especies nativas existen árboles particularmente inflamables bajo condiciones de estrés hídrico, como el litre y el boldo.

Según Conaf, el promedio de superficies vegetacionales incendiadas en los últimos 20 años es de 58 mil 537 hectáreas anuales, donde el 75% corresponde a vegetación natural y otras superficies distintas a las plantaciones forestales. En esta temporada 2017, claramente las cifras son catastróficas y sobrepasan con creces estas superficies promedio.

LEGISLACIÓN

Desde el punto de vista de la Corporación Nacional de la Madera consideran necesario hacer una legislación moderna sobre prevención y control de incendios forestales que aborde estas materias de forma integral. 

Sostienen que para llevar adelante una legislación en materia de incendios es preciso -previamente o paralelamente- modernizar la institucionalidad de Conaf llevándola a un servicio público, y eso hoy se hace muy necesario.

CONSEJO DE POLÍTICA FORESTAL 

Hace dos años se creó el Consejo de Política Forestal, encabezado por el Ministerio de Agricultura, que cuenta con la participación activa de 22 instituciones, desde académicos, gremios productivos, ONG, trabajadores y organismos del Estado, donde hubo un consenso de que en Chile se debe seguir plantando, y se fijó una meta de 500 mil hectáreas para los próximos 20 años en propiedades pequeñas y medianas.

Ese consenso lleva implícito el reconocimiento de las plantaciones en el país; en caso contrario, no se habría logrado.

EMPRESAS FORESTALES

En Chile existen 2,4 millones de hectáreas de plantaciones, de las cuales el 33% corresponden a pequeños y medianos propietarios, que hacen un total de 22 mil 744 propietarios que tienen alrededor de 800 mil hectáreas. Aproximadamente existen 10 mil empresas del sector forestal, de todos los tamaños, distribuidas principalmente desde la VII a la X Región.

Finalmente, Corma destacó que existe una seria preocupación por parte de las principales empresas forestales del país por abordar esta materia en forma altamente profesional.

Es así como las empresas forestales implementan anualmente programas de prevención y control de incendios, llevando a cabo diversas campañas de difusión en conjunto con el sector público. 

Las empresas forestales no sólo protegen su patrimonio forestal, sino también el de sus vecinos, alcanzando una superficie total cubierta de aproximadamente 2 millones de hectáreas. Se estima que entre el 60 y 70% de los incendios controlados por las principales empresas es de propietarios medianos y pequeños.

Junto con ello, mantienen activos importantes recursos físicos y humanos para combatir los siniestros, los que llegan a cerca de 46,3 millones de dólares anuales y que consideran 2 mil 440 personas debidamente capacitadas, complementadas con toda la infraestructura necesaria, como torres de detección, helicópteros y aviones.

Como contraparte, en tanto, Conaf debe proteger una superficie cercana a los 30 millones de hectáreas dentro del país y sus recursos alcanzan alrededor de 37 millones de dólares anuales.   

LOS MITOS  

Se han escuchado voces que se transmiten en las redes sociales y otros medios que señalan que las empresas quemarían sus propias plantaciones para recibir luego la bonificación que le daría el DL701.

Al respecto, Corma manifestó que este subsidio se terminó en 2012, y quienes se adscribieron a él tienen la obligación de plantar nuevamente a costa propia.

“No habría peor negocio que quemar un bosque que se demorará de 12 a 25 años perdiendo la materia prima para producir productos, y como resultado, perdiendo mercados”.  

CERTIFICACIÓN  

En esta misma línea es bueno señalar que el 70% de las plantaciones forestales en Chile están certificadas con los estándares más altos a nivel mundial de manejo forestal sustentable.

Esto quiere decir que las empresas deben velar por mantener o mejorar los beneficios económicos, sociales y ambientales a largo plazo provenientes de los bosques. Y adicionalmente, mantener o restaurar el ecosistema, su biodiversidad y paisajes.           

Síguenos: Google News
banner redes
banner redes banner redes banner redes banner redes banner redes

¿Quieres contactarnos? Escríbenos a [email protected]

Contáctanos
EN VIVO

Más visto