Fiscalizan sistemas de captación y tratamiento de agua potable ante incendios forestales

Tras los incendios que afectaron a las regiones del Biobío y Ñuble durante el verano de 2017 es que el Ministerio de Obras Públicas y la Superintendencia de Servicio Sanitarios (SISS) realizaron diferentes planes preventivos para enfrentar la época estival de este año ante posibles nuevas emergencias.

Las acciones estuvieron concentradas en generar labores de limpieza de faja y quebradas, como también generar áreas de protección de las instalaciones sanitarias que el año pasado se vieron amenazadas.

Según explicó el seremi de Obras Públicas, René Carvajal “en las cuatro provincias de la región Vialidad desarrolló un trabajo mayor en torno a las labores de limpieza de faja fiscal que desarrolla cada año, lo que permitió alcanzar un total de 805 kilómetros”.

Agregó “de forma paralela se trabajó en avanzar en seguridad en sectores priorizados ante posibles aluviones que se pudiesen generar en quebradas tras la intervención para creación de cortafuegos. La inspección y trabajos abarcaron de manera conjunta a los municipios en: Concepción, 4 quebradas sin nombre en el sector Juan Riquelme; Penco, limpieza del canal en la población La Greda; Hualqui, sector Periquillo y Unihue; Lebu, sector Isabel Riquelme, población 27F.

AGUA POTABLE

El jefe regional de la Superintendencia de Servicios Sanitarios, Rodrigo Riquelme, señaló que “se instruyó a las empresas sanitarias desarrollar un plan de mitigación en 24 localidades para evitar que siniestros afecten sistemas de producción de agua potable y plantas de tratamiento de aguas servidas y evitar la sobre exigencia. Lo que hoy estamos realizando es dar inicio a la segunda etapa de fiscalización que abarca las comunas Curanilahue, Arauco, Lebu, Cabrero, San Rosendo, Yumbel, Penco, Lota, Santa Juana, Cobquecura, Ninhue, Ñipas y Quirihue, la cual se extenderá por dos semanas”.

Mientras que “la primera se desarrolló en diciembre de 2017 en las comunas de Los Álamos, Mulchén, Nacimiento, Dichato, Florida, Hualqui, Punta de Parra, Rafael, Coronel, Chillán y Coelemu, se verificó la existencia de cortafuego en todo el perímetro de los recintos, presencia de maleza u otro elemento que podría ser fuente de combustible, a su vez la existencia de protocolos de emergencia ante eventos de esta naturaleza, también los planes de acción de evacuación de productos químicos y respaldo energético ante la ausencia del suministro eléctrico”, añadió Riquelme.