Mitos y leyendas de la provincia de Biobío

Sin duda, una de las mayores atracciones que posee el sur de nuestro país son las leyendas. De ello no queda ajeno la provincia de Biobío, donde cientos de historias increíbles han divulgado de generación y generación, dejando en ello siempre un poco de incertidumbre.

Entre estas leyendas se encuentran lugares turísticos, casas antiguas y hasta majestuosas iglesias que han trascendido en el tiempo y ya forman parte de la cultura provinciana.

La Tribuna FinDe presenta a sus lectores un recorrido por algunas de historias de las que seguramente más de alguno ya ha escuchado hablar.

Los restos humanos en la capilla San Sebastián de Los Ángeles

Para muchos esta capilla es un icono de la historia local. Se comenzó a construir en 1916 y sus trabajos se llevaron a cabo hasta 1924 cuando se convirtió en uno de los lugares más queridos de los feligreses.

Desde entonces, los cientos de ciudadanos han llegado a pedir por la salud de su familia y seres queridos, puesto que a su costado está ubicado el hospital de la comuna.

La leyenda de este reconocido monumento nacional quedó al descubierto hace un par de años -2011- cuando se reveló que acá se mantenían restos óseos. Todo quedó al descubierto después del terremoto del 27F, cuando en una de sus laderas se encontraron pequeños restos de huesos humanos.

Según han relatado angelinos conocedores de la historia local, en este lugar posiblemente podrían descansar los restos de la elite local o monjes, quienes tenían el privilegio de descansar en este sitio sagrado.

Cascada velo de la novia en Antuco

En esta comuna llena de magia y naturaleza se tejen diferentes mitos basados en el origen de su majestuoso entorno.

Una de estas maravillas se ubica en el Parque Nacional Laguna Laja, desde donde nace la cascada Velo de la novia, que tiene una caída de 14 metros.

Su nombre se debe a una antigua leyenda de dos amantes, quienes recién casados decidieron visitar este bello lugar. Esta trágica historia relata que la novia se acercó al borde de esta montaña para mirar hacia abajo y, al dar un mal paso, cayó desde lo alto. El novio, en su desesperación, se lanzó a las aguas, pereciendo ambos en el lugar. Se dice que sus almas aún rondan en este sector, demostrándose el amor eterno que hace sólo algunas horas se habían prometido en el altar para siempre.

Salto del Perro

Ubicado en Santa Bárbara, este es uno de los lugares con nombres más extraños de esta comuna y eso se debe a una curiosa leyenda ocurrida en ese lugar.

Entre los ciudadanos se relata que un prisionero y su perro escapaban de la policía en dirección a este amplio trecho de agua, aquí y sin escapatoria, luego de esta larga persecución, el hombre comenzó a pensar cómo huir cuando se vio apresado.

Cuando los uniformados casi lo capturaban, su fiel compañero, aprovechando de la angostura del río Duqueco, saltó de forma increíble hasta llegar apenas a la otra orilla. El hombre, siguiendo el valor del animal, intentó hacer lo mismo y logró, no sin dificultades, llegar al otro lado del río y escapar finalmente de la policía.

La Laguna Esmeralda

Un bello lugar de esparcimiento en el centro de los Ángeles, es representado por esta laguna artificial, la que, según cuenta la historia, era una antigua cantera desde donde se extraía importante cantidad de piedras y rocas. Esta se ubicaba al costado de la línea férrea que data aproximadamente de 1930 y que unía Los Ángeles con otras localidades aledañas.

En este lugar, según mitos de los lugareños, se presenció una importante cantidad de muertes producto del trabajo que se desarrollaba acá y la vida bohemia de los ferroviarios que colindaban en este lugar.

Las Campanas de Rere

Esta pequeña localidad a pocos minutos de Yumbel se caracteriza por su antigua arquitectura y la lejanía en la que se encuentra inmersa desde que fue fundada.

Cuenta la historia que en sus inicios Rere fue un importante centro de extracción de oro, hasta donde llegó importante número de españoles durante la colonización.

Aquí se estableció un significativo número de jesuitas y españoles. Algunos llegaron a extraer este material, mientras que otros se asentaron para educar a las culturas étnicas y sobrellevar los conflictos culturales.

Aquí nacieron tres magnificas campanas, las que están hechas con oro y de ellas nace la leyenda, que estas están hechas con un 12% de oro y el resto de cobre.

Cuenta le leyenda que estas campanas en el año 1721 intentaron ser trasladadas hasta Concepción, sin ser esto posible.

Aquí la historia relata que se utilizaron 40 yuntas de bueyes para trasladarla, sin resultados por su gran peso, por lo que este desafío no pudo ser finalizado. Lo que más sorprende es que estas pudieron ser regresadas a su lugar solo con una yunta.

Por ello, en esta localidad aun descansan estas majestuosas campanas que se han hecho hasta la fecha víctimas del tiempo, pero no de la leyenda de su gente y quienes relatan esta increíble hazaña.