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El presidente de la Federación de Productores de Fruta de Chile, Jorge Valenzuela Trebilock, está recibiendo testimonios de agricultores afectados por heladas que no solo se han extendido a zonas productivas de frutas y hortalizas, sino también se ha prolongado mucho más de lo normal, generando un daño aún no cuantificable a cultivos de hoja persistente, como las paltas, limones, naranjas y mandarinas.
El dirigente gremial explicó que "las heladas han sido muy prolongadas y muy amplias en el territorio nacional, por lo que no solo han afectado las áreas del centro y el sur", en relación al fenómeno climático y su efecto en la producción de alimentos dentro del territorio nacional, tanto para el mercado interno como del extranjero, que consumen estos productos.
"Tenemos reportes de eventos muy duros para la producción de fruta más hacia el norte, como cítricos y paltos", detalló el dirigente, quien está midiendo la afectación a nivel nacional en productos que dependen de las condiciones climáticas para desarrollarse con normalidad. "De no ser así, las inversiones arriesgan no ser recuperadas por los agricultores que se dedican a la actividad en las zonas afectadas en el territorio nacional", aseguró.
Valenzuela Trebilock contó que están realizando un catastro para conocer a fondo cómo afectan las heladas a cada fruticultor, lo que se espera para las próximas jornadas.
Aunque no se podría conocer en detalle, se tendrían proyecciones en base a las medidas paliativas de cada huerto. "Nos estamos acercando a los gremios regionales para medir el impacto de esta situación que está en desarrollo", detalló.
El representante de la Federación de Productores de Fruta de Chile indicó que en zonas específicas, las olas de frío fueron más complicadas que en otros sectores, debido a las características específicas de las heladas, en relación a su tiempo de duración sobre los predios agrícolas donde se produce fruta.
En zonas como Chimbarongo, Graneros y Mostazal en la Región de O’Higgins, el mínimo de las temperaturas superó los 6 grados bajo cero, y las heladas duraron más de 12 horas.
Valenzuela advirtió que la duración de las heladas fue particularmente complicada para la producción frutícola, llegando a ser incluso más extremos los casos en el norte del país.
El dirigente de Fedefruta explicó que las cifras anteriores consisten en una "extensión que es muy preocupante para los frutales". E incluso fue peor en San Felipe, Región de Valparaíso, donde la mínima fue de 10 grados bajo cero.
El presidente de la Federación Nacional de Productores de Fruta de Chile añadió que "lo que sabemos es que hubo productores que tuvieron que trabajar toda la noche de pie con máquinas de viento para prevenir daños, y nos están informando que ‘no hubo caso’".
A pesar de las medidas tomadas por los productores, los efectos de las heladas no pudieron ser evitados, lo que adelanta además un panorama negativo para la rentabilidad de la producción en su futura cosecha para ser comercializada en el mercado nacional o en el extranjero. Debido a esto, el gremio adelantó que continuarán recopilando información en las zonas que presenten daños más adelante, para poder de esta manera gestionar ayudas para los agricultores.
Jorge Valenzuela declaró que Fedefruta continuará "catastrando y recopilando testimonios para ayudar a medir el impacto". De esta manera, el gremio espera, de la mano de los organismos de Gobierno, asegurar la producción y rentabilidad de los agricultores, especialmente de aquellos con menos recursos para hacer frente a eventuales pérdidas.
La idea es "ir en ayuda, junto con las autoridades, de los agricultores afectados" por los efectos en los huertos frutícolas establecidos en las distintas zonas del país, ya sea para su comercialización en el mercado nacional, o para exportación, como es el caso de muchos productores de cerezas, entre otros frutales codiciados en mercados del extranjero por su calidad.
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