Corma llama a sumar a más actores en prevención y combate de incendios forestales

La gerenta regional de Corma Biobío-Ñuble, Margarita Celis, advirtió que la disminución de hectáreas de plantaciones forestales por los incendios ha generado pérdidas de puestos de trabajo, en un sector que, a su juicio, muestra síntomas de crisis y decrecimiento.

Por esa razón, explicó que los actores del mundo privado y público en materia de producción y seguridad, han aunado esfuerzos y conseguido disminuir las cifras de estos siniestros, en especial los intencionales o aquellos causados por negligencias.

"En la región del Biobío tenemos una superficie de 1,2 millones de hectáreas de bosque, que representan el 51% del territorio de la región. Esto está distribuido en un 25% en bosques nativo y un 26% de plantaciones forestales. Esta superficie está compuesta por grande y medianas empresas", explicó. De esa cifra, "los más relevantes son 92 medianos propietarios y 4.007 pequeños propietarios".

PÉRDIDA DE PUESTOS DE TRABAJO

La gerenta de Corma hizo ver que "la afectación de la temporada 2016-2017 se dio principalmente en la región del Maule, con 57.256 hectáreas que hasta el día de hoy no se recuperan. En la temporada 2022-2023, 38.988 hectáreas en la región del Biobío principalmente, tampoco se ha recuperado".

La dirigenta recalcó que "más allá de la producción de madera, el mundo forestal es una fuente de trabajo, por lo que esa pérdida es muy grande".

Ello ha redundado en "una disminución importante entre el 2017 a la fecha, que afecta directamente a la cadena productiva, desde los servicios logísticos, transporte en bosque, en industria, manufactura y procesamiento de la madera".

En ese marco, sostuvo que "el trabajo en este caso, bajo la red de Futuro Madera donde participan seis gremios, permite generar un objetivo común bajo la base de diagnóstico del sector".

La gerenta de Corma en Biobío planteó que "el sector está en crisis y decreciendo. El diagnóstico nos ayuda a generar el impacto para que vuelvan a recuperarse los bosques quemados, vuelvan los puestos de trabajo y vuelva el desarrollo para las comunas y regiones".

Sobre los incendios y la seguridad para evitarlos, valoró que "el trabajo con la Conaf ha sido uno muy mancomunado y coordinado junto a las delegaciones provinciales, regionales y Senapred. Además participan Bomberos, Carabineros, los municipios, las Fuerzas Armadas y los servicios públicos".

Según la representante gremial, "cada uno de estos actores ha permitido conseguir frutos en las cifras que han acompañado el desarrollo de esta temporada. Participamos en la mesa técnica dirigida por la Delegada Regional, donde se destaca el trabajo y coordinación que ha permitido instalar alertas preventivas e impulsar un trabajo anticipado".

A su juicio, "este trabajo anticipado genera un despliegue territorial, con patrullajes y rondas. Además la Red de Prevención Comunitaria y Comunidad Preparada de Conaf son iniciativas que se instalan en los territorios desde donde se levantan los riesgos para poder mitigar".

Celis indicó que "al manejar información sobre las condiciones climatológicas extremas con anticipación y estar coordinados, ha permitido que la ciudadanía responda de mejor manera".

La gerenta regional de Corma Biobío-Ñuble reconoció que "la intencionalidad y la negligencia en los incendios forestales son responsables de un 99,9% a un 99,7% y el trabajo de la prevención apunta a estas causas".

"Ha sido un trabajo que tiene que seguir avanzando, sumar a más actores como las compañías eléctricas que son un actor importante dentro de este desafío", adelantó, apuntando a que todos estos deben "irse adecuando a los nuevos escenarios que nos está planteando el cambio climático y tener una ley de incendios efectiva".