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Recién en la tarde este lunes fue repuesto el servicio de energía eléctrica que afectó a más de 18 mil clientes en las comunas de Laja, San Rosendo (ambas de la provincia de Biobío) y Santa Juana (provincia de Concepción).
El incidente fue atribuido al robo de más de 7.500 metros de cable de cobre de la línea 66 kV entre la subestación Charrúa y Laja, que se produjo en la madrugada del día domingo.
Así lo informó la empresa proveedora del servicio eléctrico, Transelec, que indicó que no solo hubo sustracciones de conductores, sino que también, siete estructuras quedaron en el suelo y otras 3 con daños diversos.
El gerente zonal de la compañía transmisora, Christian Weishaupt, catalogó el robo de este fin de semana como "uno de los mayores registrados en nuestro país el último tiempo".
Debido a esto, para los trabajos de reposición en la línea implicaron el despliegue de más de 70 personas en terreno, y sólo pudo ser repuesto en su totalidad a eso de las 17 horas de la tarde de este lunes "cuatro horas antes de lo previsto", señalaron desde la empresa de transmisión de energía.
"Este robo, más otros sufridos en los últimos meses en la misma línea de Charrua-Laja, nos muestra no solo el actuar delictivo de algunas bandas dedicadas al robo de conductor, sino que también la urgente necesidad de reforzar el sistema de transmisión de la zona", aseguró el vocero de Transelec.
La emergencia obligó a que los establecimientos de salud debieran operar con generadores, mientras que las clases fueron suspendidas en los recintos educativos, como jardines infantiles y salas cuna, escuelas básicas y liceos, además de los servicios de alimentación y movilización.
Frente al alza de este fenómeno delictual en la región del Biobío, la Fiscalía de Análisis Criminal, está desarrollando un foco investigativo para abordar el tema, concentrando mayoritariamente en la provincia de Biobío que se presenta la mayor cantidad de delitos de esta índole.
El fiscal jefe de Análisis Criminal, Michelangelo Bianchi, detalló que desde el segundo semestre del 2023 hubo un alza en el ingreso de denuncias de este tipo, sobre todo por sustracción de cables del tendido eléctrico.
"De acuerdo a la estadística del análisis criminal que se hace con este fenómeno delictual del robo de cable, va en un aumento considerable en cuanto al número de denuncias, principalmente radicado en la provincia del Biobío. Comunas de Cabrero y Laja son las que tienen los más altos índices de comisión de ese tipo de delitos", afirmó el persecutor.
Gracias a estas denuncias, ahora se realizarán indagaciones a cargo de un equipo especial de la Brigada Investigadora de Robos (BIRO) de la PDI, y se realizarán coordinaciones con las empresas afectadas y las autoridades gubernamentales que forman parte de la mesa regional contra el crimen organizado.
"Este foco investigativo va a la persecución penal principalmente de los delitos asociados al robo de cables, tales como la receptación, la comercialización ilícita del cable, las eventuales asociaciones ilícitas que pudiesen existir detrás de aquello y eventualmente el crimen organizado o agrupaciones delictuales que estén lucrando con esta actividad delictual", señaló Bianchi.
Precisó que se perseguirá criminalmente la flagrancia y la sustracción del cable materialmente, sin embargo el foco estará prioritariamente en perseguir la organización criminal detrás de esta actividad "que nosotros tenemos convicción que es lucrativa".
Por lo mismo, se llamó a la comunidad para que si tiene información relevante al respecto, puedan aportarla a la PDI, considerando que una dificultad para la investigación es que los cortes del tendido eléctrico por lo general se realizan en sectores rurales apartados.
"Es un delito de difícil pesquisa en cuanto a la sustracción del cable porque se produce en sectores rurales donde no existen elementos probatorios, como cámaras de seguridad u otros elementos que nos permitan determinar participación, por lo que llamamos a la comunidad a apoyarnos en cuanto a lugares donde se reduzca el cable, vehículos que se encuentren asociados a la sustracción de cable, apodos o sujetos que puedan saber de qué se estén dedicando a esta actividad ilícita".
Por otra parte, la seremi de energía de la región del Biobío, Daniela Espinoza, en este contexto afirmó que "estamos apoyando el trabajo que está realizando el Ministerio del Interior, las policías y fiscalía para prevenir y perseguir el delito asociado al robo de conductores".
Catalogó esta acción delictual como "tremendamente sensible ya que afecta la calidad de vida de las personas, hay muchos servicios críticos como postas, establecimientos educacionales y familias que dependen del suministro eléctrico. Por lo tanto estamos comprometidos para llegar con buen término a este trabajo colaborativo".
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