A los 95 años de edad murió Osvaldo Cáceres González, destacado arquitecto, investigador y defensor del patrimonio, la cultura y la historia de Los Ángeles.
Este arquitecto egresado de la Universidad de Chile en 1950, fue uno de los más influyentes en su disciplina en las últimas décadas con aportes en una serie de proyectos arquitectónicos que llevan su impronta.
Aunque era oriundo de Santiago, Osvaldo Cáceres se radicó en Los Ángeles desde 1975 en adelante, invitado por el arquitecto Ronald Ramm, con quien los unía una larga amistad. Ambos llevaron a cabo una prolífica actividad profesional que se refleja en varios edificios y locales comerciales que son de su autoría, como el edificio consistorial, el Centro Español y los bloques de edificios fiscales en la esquina de calles Valdivia con Lientur.
Activo participante de la escena cultural angelina con charlas y seminarios, fue un permanente investigador, divulgador y defensor del patrimonio local. Sus inquietudes las expresó de manera permanente, en diversas publicaciones especializados. También lo hizo como columnista desde fines de los u201970 en el diario La Tribuna donde expuso sus principales inquietudes y preocupaciones por la sostenida desaparición de la arquitectura patrimonial en la zona.
Ese empeñó se reflejó, por ejemplo, en su activo rol en la investigación y campaña para que la capilla del hospital fuera declarada monumento histórico nacional, hecho ocurrido en 1989 con motivo de los 250 años de la fundación de Los Ángeles.
También en recuperar la Casa de Ou2019Higgins, proyecto que recrea la casa patronal del Padre de la Patria y que ahora está a la espera de su financiamiento para ser levantado en la localidad de Las Canteras.
En los últimos años, fue autor del proyecto de Centro Histórico y Cultural de Santa Bárbara, hecho que le valió el reconocimiento público de ese municipio durante 2020.
Nació un 19 de septiembre de 1926, en el barrio 10 de Julio de Santiago, en el seno de una familia de clase media. Estuvo estado casado en tres oportunidades, con dos hijos del primer matrimonio y tres del segundo.
Especializado en Paris, Francia, entre 1951 y 1953, llegó a Concepción tres años más tarde al ganar un concurso para construir la Galería Universitaria en pleno centro de la capital regional.
Fue delegado de la Corporación de Mejoramiento Urbano (Cormu) en Concepción que fue responsable de la construcción de tres edificios y una veintena de conjuntos habitacionales en Talcahuano, Lota y Chillán, además de la propia capital regional.
Debido al Golpe de Estado, fue detenido y torturado por más de siete meses, luego de lo cual fue liberado. Pese a las vejaciones en ese tiempo de encierro, se dio a la tarea de escribir un libro sobre la arquitectura independiente que vería la luz en 2007.
Tras ese negro episodio en su vida, en 1976 se radicó en Los Ángeles para seguir escribiendo esta vez la historia de la capital de la provincia de Biobío, además de una prolífica labor como dirigente gremial, incansable investigador y promotor del patrimonio de la tierra que lo recibió desde aquel entonces.