El combate del incendio forestal en la comunidad pehuenche de Cauñicú, en la zona cordillerana de Alto Biobío, es uno de los que concentra la preocupación de las autoridades regionales.
El siniestro se inició el pasado 13 de febrero pero la multiplicidad de focos en distintos puntos del país, que amenazaban a personas y viviendas, obligó a postergar el envío de personal especializado y apoyo aéreo. Además, la intrincada geografía de ese territorio, distante unos 30 kilómetros al oriente de la localidad de Ralco, torna más compleja cualquier operación de combate.
Recién en los últimos días, cuando ya están contenidos y controlados los siniestros de mayor envergadura, se han podido destinar recursos terrestres y aéreos hacia la zona cordillerana para contener el avance de las llamas.
De manera preliminar, la Corporación Nacional Forestal (Conaf) se han reportado cerca de 400 hectáreas destruidas por la acción de las llamas, principalmente de bosques nativos.
Durante este fin de semana, hubo aviones cisterna y helicópteros que arrojaron agua en los sectores más complejos. Incluso, el avión Ten Tanker realizó un par de descargas.
En la zona se cuenta con puesto de comando y logística permanente habilitado por la Conaf con el fin de verificar el estado de avance de las llamas en esa zona cordillerana.
En el reporte de los siniestros en la Región del Biobío, el subsecretario de Subdere, Nicolás Cataldo (que oficia como enlace región), se refirió al incendio en Alto Biobío, asegurando que se trabaja con todos los recursos disponibles para su contención.
A nivel regional, si bien hay 11 incendios forestales activos que están en labores de combate, los más importantes son los del área cordillerana de Cauñicú y el denominado incendio Santa Ana.
Este último ya suma más de 70 mil hectáreas quemadas y abarca a las comunas de Nacimiento (provincia de Biobío), Santa Juana, Coronel y San Pedro (las tres provincia de Concepción).
Se trata de uno de los siniestros de mayor envergadura en la historia del país, tanto por la superficie afectada como la cantidad de víctimas fatales y daños materiales.
CORTE DE RUTA DE LA MADERA
Debido a que las llamas quemaron árboles situados a orillas de la Ruta de la Madera, se encuentra cortado el tránsito de esa vía entre los kilómetros 18 y 27 (desde San Pedro de la Paz hacia Santa Juana).
En consecuencia, la circulación vehicular se debe realizar por el sector Patagual desde y hacia San Pedro de la Paz para continuar hacia Santa Juana y Nacimiento.
El seremi de Obras Públicas, Hugo Cautivo, aseguró que la acción busca realizar un control de rodados y retiro de árboles siniestros, algunos de gran tamaño, que quedaron a un costado del camino.
La autoridad precisó que en esas labores trabajan brigadas de la Dirección de Vialidad y de la Forestal Arauco, poniendo especial prioridad en los árboles quemados que pueden desplomarse.
“Esperamos durante la semana recuperar el tránsito normal, probablemente con segregación”, señaló Cautivo quien precisó que la prioridad es generar tranquilidad en la ciudadanía, privilegiando la seguridad de las personas: “Sabemos que esto va a generar incomodidad pero primero es la vida”.
También sostuvo que se está llevando a cabo un trabajo público y privado para hacer un diagnóstico sobre la situación de la Ruta de la Madera, principalmente para evitar los deslizamientos de tierra sobre la vía.
Añadió que será un trabajo que probablemente se extienda hasta el invierno, época en que las lluvias y el debilitamiento del terreno por los incendios forestales pueden ocasionar emergencias de esa naturaleza.
(Fotografías cedidas por la Delegación Presidencial Provincial de Biobío)
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