A todos nos ha pasado que nos encontramos ante una noticia tecnológica que nos deja sin aliento. Y es que, muchas veces, la realidad supera a la ficción y no encontramos qué decir ante las nuevas realidades. Resulta extraño pensar que hace apenas tres décadas el internet era la gran novedad y la existencia de sitios como 7Slots Chile o cualquier página web se nos hacía cosa del futuro.
Hoy las cosas son muy diferentes. Conceptos como la IA y la computación espacial son hechos, aunque parezcan sacados de un libro de Ray Bradbury. A continuación, ahondamos en tres planteamientos venidos directamente del futuro y que están revolucionando nuestros modos de vida.
Autos que se conducen solos
Hace 100 años la industria automotriz estaba recién iniciando su historia. Los vehículos personales eran considerados un lujo, exclusivo para los más adinerados, y realmente muy pocos sabían conducir. Mucha agua ha corrido desde entonces y hoy estamos ante un nuevo umbral: la popularización de los autos que se mueven sin conductor ¿Cómo es esto posible?
De momento, se encuentran operativos en ciertas ciudades con un desarrollo urbanístico determinado, condición esencial para su correcto funcionamiento. Los vehículos que se conducen solos lo hacen con una serie de sensores —cientos de ellos— llamados LiDar, repartidos en el espacio interior y en la carrocería.
Estos son capaces de hacer un mapa de hasta 200 metros en torno al auto y se conectan a un total de más de 50 computadoras que procesan los datos suministrados durante los trayectos. En líneas generales, imitan la manera en que el cerebro humano analiza las distancias, pero con el agregado de que no permiten distracciones.
Empresas como Tesla, Ford, Waymo, Uber y Apple ya tienen dispuestos en ciertas ciudades sus coches sin conductor que no dejan de resultar curiosos para quienes los abordan. Mayoritariamente están reservados a deliverys, taxis y encomiendas, ya que, a la fecha, su costo sigue siendo muy alto y para sacarlos a la venta. Sin embargo, todo parece indicar que en un futuro cercano estarán disponibles para particulares.
Microchips para transmitir información desde y hacia el cerebro humano
Este 2024 se inauguró con una noticia tecnológica y médica que ha dado de qué hablar: la empresa Neuralink, propiedad del multimillonario Elon Musk, introdujo con éxito un microchip en el cerebro humano ¿De qué va todo esto?
El implante recibe el nombre de "Telepathy" y significa un paso gigante en la vinculación entre la industria tecnológica y la neurociencia. En un principio está pensado para ayudar a tratar problemas médicos, sobre todo discapacidades y malfuncionamiento de las extremidades. Pero la situación está planteada para todo tipo de debates que incluyen cuestiones éticas y biológicas, sin dejar de lado la aterradora posibilidad del "hackeo de mentes".
En realidad, los implantes cerebrales existen desde el año 2004, utilizados en la rama de la medicina para ayudar en el tratamiento enfermedades como el parkinson, la sordera, el síndrome de Tourette y la epilepsia, mediante la emisión de impulsos eléctricos a través de micro cables o electrodos a partir de un generador. Pero la discusión con el dispositivo de Neuralink se sustenta principalmente en que este, lanzado en 2024, permite además intercambiar datos entre el cerebro y el mundo exterior, llevando todo el asunto a otros planos.
Concretamente el microchip opera a través de más de 1000 electrodos que leen la información y la actividad de las neuronas, transmitiéndola a dispositivos exteriores en tiempo real, que tienen la facultad de manipularla. Las preguntas giran en torno a si es el inicio de una nueva era y qué otras aplicaciones podrían tener estos implantes, además de las posibilidades médicas. Seguramente, más temprano que tarde tendremos las respuestas.
La "computación espacial" y las nuevas realidades
No son pocas las series y películas que, durante décadas, nos han mostrado un futuro en que es posible comunicarnos e interactuar con espacios más allá de nuestro alcance inmediato a través de hologramas y realidades mixtas. En tiempos recientes se ha probado que no es cosa de la fantasía, sino que, con la tecnología actual ya es posible estar presentes en cualquier lugar.
De esto se trata la llamada computación espacial o informática espacial. Puede que no conozcas de qué va el término, pero seguramente te has familiarizado en tu día a día con alguna de sus aplicaciones. Estas incluyen los códigos QR que han "digitalizado" nuestra forma de comprar, los GPS integrados a nuestros automóviles y cuestiones como la proyección de realidades virtuales y mixtas en diferentes industrias. Justamente engloba diferentes procesos de digitalización de máquinas, objetos, ambientes e incluso personas.
Si hoy somos capaces de comunicarnos con computadoras a través de la voz, con ínfimos movimientos del globo ocular o a través de pequeños gestos es gracias a este planteamiento. Con el pasar del tiempo, las improntas en telecomunicaciones y la disponibilidad de más recursos hacen que los límites se sigan expandiendo ¿Hasta dónde llegaremos?