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El presidente de la Cámara de la Producción y del Comercio de Biobío, Álvaro Ananías, llamó a que las empresas cumplan las normas medioambientales para desarrollar proyectos en la región, pero también abogó para que las instituciones públicas, a través de dichas leyes, promuevan el crecimiento y desarrollo de las zonas y sus habitantes, a través del equilibrio entre las actividades económicas y los resguardos frente a algunos de sus efectos.
"El compromiso del país tiene que tener un equilibrio, que va por la preocupación por el medioambiente y el cumplimiento de las normativas medioambientales", destacó el representante gremial.
Sin embargo, resaltó que "tampoco se pueden tomar acciones que eviten el poder desarrollar proyectos de desarrollo económico que apuntan a generar empleos de calidad para los habitantes de una zona o una región".
El timonel de la CPC regional observó que dichos puestos de trabajo "permiten desarrollar sus vidas, generar educación para sus hijos y progreso a las personas que trabajan".
El directivo recalcó que "esto requiere de un equilibrio. Las cosas no son blancas o negras. Desde el preciso instante en que el Estado decide hacer un camino, genera impactos ambientales", haciendo ver que "ese camino o ese puente, se hace porque mejora la calidad de vida de las personas".
"En el panorama global es positivo para el desarrollo del país, y pasa de la misma forma con los proyectos de inversión, desarrollo de negocios, industrias y plantas", comparó Ananías.
A su juicio, "uno debe siempre cumplir la normativa, siempre. Pero debe haber una actitud proactiva entre las instituciones que piden y exigen el cumplimiento de la normativa con los inversionistas que desarrollan los proyectos".
"Muchas veces uno puede decir que algo no se puede hacer, pero que se puede hacer una acción paliativa y con eso el proyecto se desarrolla cumpliendo la normativa", comentó.
Ejemplificó lo anterior, indicando que "si tengo un proyecto donde invierto en una zona en la cual existe una especie arbórea y yo quiero cuidarla, ésta puede ser trasladada a otro predio donde pueda seguirse desarrollando".
Con dicha medida, el titular de la CPC regional apuntó a la posibilidad de "cuidar el medioambiente como el desarrollo económico, y por tanto, el crecimiento de las personas que viven en esas zonas. Es fundamental que hoy se cuide la competitividad de las regiones y los países, porque cuando se pone muchas complicaciones para inversiones, quienes quieren desarrollarlas buscan otros lugares".
Álvaro Ananías aseguró que "cuando en el lugar donde se quiere invertir no existe una comunicación proactiva de cómo ir desarrollando, conversando y cumpliendo la normativa en forma proactiva, lo que se hace es encontrar zonas más amigables donde conversarlo. Eso se llama competitividad y es fundamental que como Región del Biobío no perdamos competitividad".
"En un espectro mayor es importante que como país no perdamos la competitividad", agregó, indicando que "la empresa privada va a cumplir la normativa, lo importante es que siempre hay aspectos que hay que ir resolviendo para poder instalar un proyecto".
"Es ahí donde instituciones como el Servicio de Evaluación Ambiental, la Conaf u otras instituciones conversen pro-activamente de cómo ir resolviendo", llamó. "El tema es resolver, y cuando se entiende que se requiere de inversiones y empleo, se buscan formas de avanzar", cerró.
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