Panoramas

Es un lugar común quejarse por la falta de panoramas entretenidos en la ciudad de Los Ángeles. Los críticos suelen decir que la urbe es derechamente fome por carecer de una oferta de actividades que sea generosa y diversa.

Un mentís a esas aseveraciones fue lo que sucedió el pasado fin de semana en que nuestra capital provincial estuvo pletórica de actividades para todos los públicos, todas las edades y en diversas manifestaciones del ser humano. Comenzó el viernes con la presentación a tablero vuelto del destacadísimo pianista Roberto Bravo que siguió al día siguiente con las exposiciones y presentaciones artísticas del encuentro de mujeres empoderadas en la plaza Pinto, que también tuvo artesanías y artistas sobre un escenario montado especialmente para la ocasión. En paralelo, miles de personas asistían para disfrutar de la presentación de artistas del género urbano en el estadio municipal de la ciudad. Como si fuera poco, hubo un torneo de barcos de papel en la zona de la laguna Esmeralda que congregó a un alto número de asistentes.

Perfectamente se podría decir que lo ocurrido el fin de semana es una excepción. Sin embargo, cuando se comienza a escarmenar un poco más a nivel local, es posible encontrar una variedad de actividades socioculturales para todos los gustos y edades, organizadas tanto desde instituciones públicas como de organizaciones privadas o también de simples ciudadanos deseosos de expresarse en alguno de los varios planos de la cultura y la recreación.

Porque, como bien reza el refrán, las personas también necesitan espacios para el ocio, tiempo libre y esparcimiento. El ocio, por definición, es el tiempo en que se realizan actividades que no tienen que ver con el trabajo. Estas actividades ayudan a quitar o disminuir el estrés y tener ocupada la mente en otras cosas que no sean las obligaciones, para así tomar conciencia de uno mismo.

Este tiempo libre es el más propicio para desarrollar la creatividad, las actitudes y aptitudes personales, la comunicación auténtica y la relación personal. Las actividades de ocio son importantes porque aportan energía positiva a la persona, refrescan la mente y ayudan a largo plazo a mantener la salud y tener paz mental. Las investigaciones han demostrado que un poco de ocio al día ayuda a reducir algunos males de la salud, como el riesgo de tener diabetes e hipertensión, además de mejorar la salud física, mental y la calidad de vida.

Aparte de ser una forma de ocupar el tiempo libre, las actividades recreativas sirven también para socializarse. Son una forma de estar con los seres queridos y disfrutar, además de darnos la oportunidad de conocer gente nueva, crear nuevas amistades y de aprender cosas nuevas.

La realización de ese tipo de actividades - desde la música de arte superior hasta las presentaciones de libros de escritoras destacadas, pasando por interpretaciones de las nuevas corrientes musicales - busca precisamente llenar esos espacios que son necesarios e indispensables para el desarrollo integral del ser humano.

No se debe desdeñar de su realización. Muy por el contrario, se deben robustecer para así mejorar la calidad de vida de las personas.