Impresiona el caudal que se observa en los Saltos del Laja. Después de una sequía que se prolongó por más de una década, ese reconocido punto turístico muestra un enorme volumen de agua que se desbordó y que, incluso, alcanzó los puestos de artesanías situados en el sendero de acceso a la cascada principal.
Este sábado, cientos de personas aprovecharon la jornada para trasladarse a los Saltos del Laja y presenciar ese espectáculo de la naturaleza, tomarse fotos y dejar registros del evento.
Sin embargo, no es la primera vez que se vive una situación de esa envergadura. En la memoria más reciente están las inundaciones del 11 de julio de 2006 que dejaron más de una decena de víctimas fatales y enormes daños materiales en la provincia de Biobío, concentrados en el sector de La Suerte (Los Ángeles).
En aquella ocasión, la zona de la cascada principal de los Saltos del Laja presentó un aspecto similar en cuanto al volumen de agua. Sin embargo, en ese año se vivió un hecho trágico. El colapso del puente sobre el estero Batuquito, situado un par de kilómetros al norte de la cascada, provocó que un automóvil cayera al cauce, falleciendo su único ocupante. Una cruz al costado del camino recuerda ese suceso.
En 1996, gracias a las gestiones de la Municipalidad de Yumbel, se realizó un mejoramiento sustantivo en el sendero de acceso hacia la cascada principal. Se colocaron pavimentos, barandales e iluminación. Sin embargo, las lluvias del invierno inundaron completamente la zona, arrasando y destruyendo las obras de hermoseamiento recién entregadas.
La memoria debe viajar más atrás para recordar otro episodio similar. En 1981, el río Laja volvió a exhibir toda la fuerza de su caudal para anegar completamente la zona inmediatamente a continuación de las cascadas. Antes se vivió algo así en 1971. Más hacia atrás el recuerdo se vuelve un poco difuso.