Este miércoles el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG)levantó una alerta fitosanitaria tras encontrar dos caracoles gigantes africanos. La especie, también conocida por su nombre científico "Lissachatina fulica", se encuentra dentro de las 100 especies exóticas invasoras en el mundo.
¿QUÉ SIGNIFICA ESTA CATEGORÍA?
Según el Grupo Especialista de Especies Invasoras (ISSG) en su documento "100 especies exóticas invasoras más dañinas del mundo", esta clasificación corresponde a "la increíble variedad de especies que poseen la capacidad, no sólo de moverse a través de un gran número de vías, sino también de establecerse, prosperar y dominar nuevos lugares".
Actualmente, las especies exóticas invasoras son la segunda causa de amenaza y extinción de especies, precedida tan sólo por la pérdida de hábitat.
¿DÓNDE Y CÓMO FUERON ENCONTRADOS?
Según el SAG, ambos ejemplares fueron hallados en el norte del país. Uno, en Tarapacá, escondido entre plantas ornamentales ingresadas de forma ilegal a Chile, y el segundo, en la región de Arica y Parinacota, donde una persona trajo desde Brasil conchas de recuerdo y en su interior, aún habitaba el caracol.
Se trata de una plaga que no se encuentra presente en Chile, es posible encontrarla en otros países sudamericanos como Argentina, Perú y Bolivia. El llamado de la entidad es a "no comprar productos vegetales ilegales y en caso de encontrar al molusco, denunciar inmediatamente".
¿QUÉ PUEDE LLEGAR A CAUSAR?
Proveniente de África, la especie hermafrodita (es decir, que posee órganos reproductivos asociados a los dos sexos y, por tanto, pueden elegir qué gametos utilizar), viven hasta 10 años.
¿Dónde está el peligro? En las enfermedades y parásitos que puede traer consigo. El contacto con la baba de este caracol puede provocar diarrea, fiebre, enfermedades intestinales e incluso la muerte. Si bien el SAG confirmó que los ejemplares hallados en el norte no están contaminados, seguirán fiscalizando lugares que presenten antecedentes vulnerables ante esta especie.
¿QUÉ RUBROS AFECTA?
Una especie exótica invasora (EEI) es una especie no nativa de un ecosistema, como el caracol africano. Este es capaz de causar impactos negativos ambientales, económicos y perjuicios a la humanidad. Generalmente las especies invasoras comparten unas características que dificultan su manejo y control: Altas tasas de reproducción, ausencia de depredadores naturales, y flexibilidad de adaptación en diferentes ecosistemas, señala la Dirección de Recursos Naturales de Colombia.
"Dentro de los impactos ambientales se resalta el impacto negativo sobre la biodiversidad, el daño en el suelo y la causa de disminución o incluso extinción de especies nativas" especifica el estudio. Dentro de los impactos sociales, se destacan la posible proliferación de enfermedades y dentro de los impactos económicos predominan las enormes cifras de dinero que se invierten para el manejo y control de estas especies, la pérdida de productividad en diferentes ecosistemas y la reducción en el valor de las propiedades por los daños y afectaciones en donde se encuentra la afectación la invasión.
El estudio, realizado en Colombia para prevenir, combatir y eliminar esta plaga en el país, hace hincapié en que "Las especies invasoras alteran la estructura, procesos y funciones de los ecosistemas conduciendo a un desequilibrio en la integridad ecosistémica y en la regulación de algunos procesos naturales vitales".
En varios países, el caracol gigante africano es considerado una plaga de importancia agrícola, ya que posee una dieta polífaga. Esto significa que no presenta preferencias sobre ningún cultivo en particular y es capaz de alimentarse de más de doscientas especies vegetales, varias de estas cultivables.