Sin duda lo anunciado por el Presidente de la República, Sebastián Piñera de iniciar un Congreso Constituyente es uno de los hechos más relevantes de los últimos 40 años, ahora la pregunta es ¿Por qué un congreso y no una asamblea?.

Partamos por explicar que es un Congreso Constituyente. El Congreso Constituyente viene a cumplir un rol fundamental en el congreso, siendo el parlamento, quien va a nombrar desde sus propios integrantes a quienes serán los encargados de elaborar una nueva Constitución en un plazo de 12 meses. Teniendo la próxima elección de finales del 2021 el acto electoral que validaría a la nueva Constitución.

Ahora la pregunta es: ¿Este congreso está preparado moral y éticamente para elaborar una nueva Constitución?

A los ojos de miles de chilenos sin duda es poco factible que este congreso, que hoy no tiene ni goza de legitimidad, sea quien conduzca este importante proceso, por lo tanto se ve muy poco probable que esto pueda llegar a puerto por esta vía, a no ser que se tenga una nueva elección y se renueven todos los cuadros de diputados y senadores y sea así un nuevo congreso con nuevos rostros quienes asuman esta importante y relevante labor.

Pero nos queda la opción de la Asamblea Constituyente. ¿Qué es esta Asamblea y quiénes la componen?. La Asamblea Constituyente es un grupo de ciudadanos representante del Pueblo que se eligen específicamente para la elaboración de una nueva Constitución, lo primero que debe ocurrir es que el Presidente de la República debe llamar a un plebiscito para que la ciudadanía se exprese si quiere decidir por esta asamblea, si se aprueba lo antes mencionado, se debe elegir a los representantes de la Asamblea Constituyente y finalmente una vez realizado el escrito de la Carta Magna se debe nuevamente llevar a votación ciudadana para aprobar o rechazar (la Constitución).

Pero finalmente hay una tercera opción, la Convención Constituyente de la cual muy pocos hablan por desconocimiento, esta fórmula viene a generar una combinación entre el congreso y la ciudadanía civil elegidos popularmente en una elección democrática, serían ellos los que tendrían la labor de formular la nueva Constitución.

Dicho aquello es relevante destacar que hoy Chile tiene una gran posibilidad de renovar su Constitución, una Constitución que sea adecuada a los tiempos de hoy para no seguir regidos por una Carta Magna realizada entre 4 paredes y en Dictadura, es ahora, es el cambio, la constitución del 80 ya no da para más!.