Opinión

La triste realidad de los deportistas escolares especiales, medallas que no tendrán más apoyo

Administrador Público
Licenciado en Ciencias Políticas

Jorge Rivas, alcalde de Mulchén,
Jorge Rivas, alcalde de Mulchén / FUENTE:

Alemania fue el anfitrión de los Juegos Mundiales de Olimpiadas Especiales, Berlin 2023 y Chile, brilló con 14 medallas, tres de ellas de Jordan y Tamara, dos estudiantes de la Escuela de la Solidaridad, donde comparten salas y aprendizaje con otros 53 compañeros y compañeras que siguieron atentos su participación en Europa.

Jordan y Tamara fueron reconocidos mundialmente, pero también por sus pares y por todo Mulchén,  una ciudad que hoy celebra uno de los triunfos deportivos más importantes de la historia de nuestro deporte.

La importancia de este logro,  no solo pasa por el reconocimiento de un trabajo que nace en una escuela municipal que fomenta la educación integral y que entre otras materias considera al deporte como una de las principales herramientas de inclusión en esta materia.

Por lo mismo, no es casualidad que en el sitio oficial de la competencia (https://www.berlin2023.org), se lea en el comienzo que "Los Juegos Mundiales de Olimpiadas Especiales son el evento deportivo inclusivo más grande del mundo. Es el evento deportivo que celebra la diversidad del deporte y su poder para unir a personas de todos los ámbitos de la vida".

Fueron 7.000 atletas, 26 deportes, 190 delegaciones, 20.000 voluntarios, por lo que se vuelve indispensable que se reconozca al deporte inclusivo como una herramienta metodológica que, a través de esta integración, permite acabar con prácticas sociales horrendas como la discriminación y el bullyng.

Es cierto, Mulchén celebra uno de los triunfos deportivos más importantes de su historia, pero la felicidad de hoy puede perderse en el corto plazo si no existen políticas deportivas para los niños/as y adolescentes que desde sus escuelas especiales buscan un lugar en la sociedad.

La pregunta natural que surge hoy es, cuáles son los caminos que Tamara Díaz y  Jordan Morales deben seguir para hacer de este sueño una vida, porque cuando uno habla con ellos percibe, como en todo/a niños/as, el deseo de seguir haciéndolo bien y, no puede ser que una vez que abandonen el sistema escolar queden a la deriva en cuanto al deporte competitivo que viven desde su sitial.

Urge crear políticas deportivas nacionales que busquen la continuidad de nuestros atletas especiales, especie de reclutadores que recorran el país, a través de las instituciones pertinentes, para buscarles desde la más temprana edad, porque si bien en Mulchén se hace, lo cierto es que a medida que los años pasan, tanto la municipalidad como su departamento de educación, se ven atados de manos para seguir brindándoles el apoyo que se merecen y que por cierto, necesitan.

Contar con monitores que puedan seguir usando la infraestructura de las escuelas y liceos fuera de los horarios es otra alternativa para trabajar con estos/as deportistas y créanme, se puede, porque hace 5 años que tenemos los frutos de nuestra Escuela de Fútbol Municipal, la que con gastos propios tiene entre sus jugadores a Tamara y Jordan, además de un grupo de compañeros/as.

En mi calidad de presidente de la Comisión de Deportes de la Asociación Chilena de Municipalidades llevaré esta inquietud a todos mis colegas del país con el objetivo de prestarnos acompañamiento y apoyo (municipalismo colaborativo) para poder implementar, desde los gobiernos locales, toda las iniciativas que busquen robustecer el trabajo con nuestros deportistas especiales.

Mientras ello ocurre, no puedo dejar de resaltar el importante apoyo que el Gobierno Regional del Biobío, encabezado por Rodrigo Díaz, ha dado al deporte escolar, pues por primera vez desde que existe esta historia, se realizarán las finales de "Los Juegos Nacionales Escolares" en las tres provincias de Biobío: Arauco, Concepción y la nuestra. En Mulchén, gracias a nuestra dedicación en cuanto a infraestructura, seremos parte de este logro, albergando dos encuentros de Balón de Mano.

Jorge Rivas Figueroa

Administrador Público

Licenciado en Ciencias Políticas

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