Opinión

Igualdad de remuneraciones

Socio Méndez y Amthauer Abogados

Christian Amthauer Lara, Christian Amthauer Lara
Christian Amthauer Lara / FUENTE: Christian Amthauer Lara

A pesar de los avances conseguidos en equidad de género dentro del mundo laboral, como país nos queda aún mucho camino por recorrer. De acuerdo con el estudio Zoom de Género de Ocec UDP y Chile Mujeres, la brecha salarial entre mujeres y hombres aumenta por segundo año consecutivo, llegando a ser el ingreso promedio de las mujeres un 25,5 % menor que el de los hombres, y a mayor calificación laboral, también aumenta la diferencia.

A trece años de la entrada en vigencia de la Ley 20.348, que modificó el Código del Trabajo resguardando el derecho a la igualdad salarial entre hombres y mujeres, estas cifras nos siguen revelando que todavía hay una deuda pendiente en la que hay que trabajar.

Dicha ley dispone que el empleador debe cumplir con el principio de igualdad de remuneraciones entre hombres y mujeres que presten un mismo trabajo, donde no son consideradas arbitrarias las diferencias objetivas en las remuneraciones que se funden, entre otras razones, en las capacidades, calificaciones, idoneidad, responsabilidad o productividad. Además, ante vulneraciones, exige un procedimiento de denuncia escrita al interior de la empresa, y la posibilidad de recurrir a la justicia laboral a través del procedimiento de tutela de derechos fundamentales.

Asimismo, se estableció que las empresas de más de 200 trabajadores deben contar con un reglamento interno que contenga funciones y características de los cargos. El principio de igualdad también se hace aplicable a los empleados del sector público a contrata y se regula dependiendo del grado.

A pesar de estas modificaciones e incorporaciones, la ley no ha resultado lo realmente efectiva para avanzar en materia de igualdad de género en el mundo laboral. Estamos en presencia de una de las formas más violentas de discriminación, respecto de la cual, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha expresado que eliminarla es "fundamental para alcanzar una igualdad de género genuina y fomentar la equidad social y el trabajo decente".

A la luz de los resultados del estudio del Ocec y Chile Mujeres, es urgente adaptar y modernizar ciertas normas laborales que incentiven la contratación de la mujer y hagan más compatible el rol de madre y padre con el trabajo, además de avanzar a una sala cuna universal y permitir el teletrabajo o trabajo flexible.

Debemos comprender que la igualdad salarial entre hombres y mujeres es un aspecto clave en nuestro desarrollo como país y trabajar para alcanzar realmente ese objetivo.

Christian Amthauer Lara

Socio Méndez y Amthauer Abogados

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